Oportunidad para las pymes: 864.000 vacantes en Tecnologías de la Información

En el año 2015 quedarán vacantes en Europa 864.000 puestos de trabajo en el sector de las Tecnologías de la Información (TI) y habrá muchas dificultades para cubrirlas. Son estimaciones de la Comisión Europea.

En un panorama de desempleo como el actual es una buena noticia que servirá de estímulo a las pymes de nuestro país y también, claro, para movilizar a quienes diseñan las estrategias curriculares en el mundo de la formación.

Afirma también la Unión Europea que el 40% del incremento del PIB de las empresas y el 25% de su mejora de productividad dependen de las tecnologías de la información.

El sector TI, a pesar de la crisis, mantiene crecimientos constantes y emplea a más de 6,6 millones de personas en Europa, lo que supone un 3,1% del total de la fuerza laboral.

Las competencias tecnológicas (e-skills) representan la verdadera alternativa en las oportunidades de negocio y de empleo.
En Europa preocupa el desajuste entre el sistema educativo, el actual mercado laboral y la contratación inmediata o a corto plazo, ya que, según la Unión Europea, los empresarios se lamentan de que no encuentran profesionales jóvenes con competencias digitales adecuadas.

Silvia Leal, directora de Programas de Innovación y Tecnología del Instituto de Empresa, afirma  que “en nuestro país, el número de matrículas en estudios TI ha bajado desde el año 2003 cerca de un 40%. Esto implica que será difícil cubrir las “viejas vacantes”, pero también las nuevas demandas que traen consigo las nuevas tendencias (Big Data, movilidad, gamification…), donde se requieren fuertes conocimientos del negocio, pero también una importante base tecnológica”.

Resulta paradójico, precisamente porque la crisis no está afectando tanto al sector de las tecnologías como a otros. En nuestro país hay unos 600.000 profesionales en las TI, lo que supone un 3,3% de la fuerza laboral.

Negocio y oportunidades de empleo para los «e-competentes»

En la economía digital, dice también la UE, por cada puesto de trabajo que se destruye, surgen 2,6 puestos digitales. Pero muchos pequeños empresarios se preguntan: ¿puedo competir en la economía digital o es para unos pocos?

La transformación o economía digital es imparable y lo hemos visto, por ejemplo, en el plano de la vida personal y el ocio. Ya casi ninguna actividad queda fuera de esa digitalización o necesita de su apoyo en todas o en algunas fases para producir, distribuir y comercializar bienes y servicios de todo tipo.

¡No seamos antiguos, todo se puede comprar y vender por Internet! De hecho, el comercio electrónico en nuestro país crece a tasas del 20 %, y de los 26 millones de españoles internautas, 13 millones son compradores habituales a través de la Red.

Negocios tradicionales pueden y tienen que dar un salto hasta el infinito… y más allá. La tecnología resuelve ese salto, y sin que los costes sean estratosféricos. En muchos casos, el capital, siendo importante, no tiene ni de lejos tanta transcendencia como la capacidad tecnológica. El portal de viajes Destinia.com -utilizado a nivel internacional- nació en el barrio madrileño de Lavapiés y necesitó un capital inicial de lanzamiento de solo 3000 euros. Seguro que el bar de al lado tuvo que invertir varias decenas de miles de euros en licencias y reformas.

Si España recibe una media de 60 millones de turistas al año, y muchas pequeñas empresas viven de venderles todo tipo de productos y servicios a esos visitantes durante una semana, ¿no podrían hacer eso mismo las 51 semanas restantes allá donde regresen los turistas?

Así pues empleados y empleadores deben tomar posiciones, adquirir «e-competencias» y demostrarlas. Hay oportunidades de negocio y de empleo y no solo para quienes se dedican a la formación.

Foto: Scott McLeod, distribuida con licencia Creative Commons BY 2.0.