Cuatro puntos básicos en toda campaña de ‘email’ para dispositivos móviles

El horario de verano ha muerto. Los smartphones nos obligan a estar siempre disponibles para atender las peticiones de los usuarios allá donde estén. En la era digital, la movilidad adquiere un papel fundamental para que la conexión entre nuestro negocio y los clientes no se rompa nunca. Los dispositivos inteligentes nos dan la posibilidad de ofrecer un mejor servicio aunque nuestro público se haya ido de vacaciones. Pero, además, usando las técnicas adecuadas, podemos lograr que el verano se convierta en un período muy provechoso para nuestra actividad.

En este sentido, el correo electrónico es una herramienta fundamental para no perder el contacto con los clientes. Unido al potencial de los smartphones, el email se convierte en una de las técnicas de venta más efectivas. Según el último informe sobre comercio electrónico elaborado por la empresa Custora, la mayor parte de los ingresos generados mediante este tipo de acciones de marketing procedían de un teléfono inteligente.

Los dispositivos móviles representan casi la mitad del tráfico de las tiendas online. En concreto, registran un 32,9% del tráfico directo a las páginas web. Esto los convierte en la pieza fundamental de cualquier estrategia de marketing.

Para crear una exitosa campaña de email marketing debemos pensar en nuestra audiencia: qué tipo de contenidos les interesan, con qué frecuencia consultan el correo, etc., pero, sobre todo, debemos centrarnos en qué programa y dispositivo utilizan para leer los emails, lo que nos permitirá organizar el mensaje para mejorar la tasa de apertura.

No es lo mismo leer el correo desde un ordenador que desde un teléfono inteligente. Debemos centrar nuestros esfuerzos en optimizar nuestra campaña de emailing teniendo en cuenta el componente móvilpara que la experiencia del usuario sea plenamente satisfactoria. Para ello, conviene repasar detenidamente estos cuatro puntos básicos en toda campaña de email para dispositivos móviles:

1. Legibilidad: El tamaño de fuente debe ser mayor en dispositivos móviles, para así facilitar la lectura. El mínimo más adecuado para el cuerpo del texto es 14 píxeles y 22 en el caso de los títulos.
2. Disposición: Sencillo y directo, así debería ser el email perfecto para dispositivos móviles. Es preciso eliminar cualquier contenido superfluo que distraiga al lector, como enlaces o imágenes irrelevantes. Cuanta más facilidad tenga el usuario para desplazarse por la pantalla, mejor. En este sentido, el diseño a una columna es muchísimo más efectivo. Transmite la sensación de orden y favorece la legibilidad.
3. Llamadas a la acción: Además de informar, en el mensaje insertaremos varios botones que permitan al usuario trasladarse a otro entorno; a nuestra tienda online o a una página de entrada, por ejemplo. Estas llamadas a la acción deben colocarse de una forma clara y sencilla, diferenciando el texto de éstas del resto del cuerpo del mensaje. Si utilizamos un botón, éste debe ser touch-friendly (sensible al tacto), para que al pulsarlo abra otra pestaña automáticamente.
4. Imágenes: Aunque incluyamos imágenes en el correo, nuestro mensaje debe poder leerse sin necesidad de usarlas. Así nos anticipamos a las numerosas aplicaciones existentes que bloquean por defecto las imágenes adjuntas en los correos. Si nuestro mensaje depende exclusivamente de la imagen y ésta no se descarga, estamos perdidos. Usar un texto alternativo permitirá que el usuario se haga una idea de qué queremos decir sin necesidad de depender del componente visual.

Los smartphones han ampliado el horario de atención al público a las 24 horas del día. Estar permanentemente conectado es una oportunidad más para que las empresas fortalezcan la relación con los consumidores. No tener en cuenta esta realidad sale caro. Las marcas pierden un 68% de su tráfico móvil debido a una mala adaptación de sus contenidos a estos dispositivos, con lo que también pierden oportunidades reales de negocio.