Olvídate del ‘brainstorming’ y pásate al ‘brainwriting’Ángel María Herrera 19 septiembre, 2016 Sin duda la creatividad es muy importante para cualquier emprendedor, pero no suelen enseñarnos herramientas para potenciarla y mejorarla. La más recurrida suele ser la famosa “tormenta de ideas” o brainstorming para los amantes de anglicismos. Esa técnica que, sin duda, tiene sus ventajas tiene a su vez algunas carencias, que no la hacen idóneas para cualquier pyme, porque para empezar hay que saberla usar bien y muchas veces las utilizamos de manera superficial. Revisemos algunos de sus puntos débiles: Se ponderan en exceso las ideas iniciales. Todas esas ideas que afloran al principio se asumen como las más valiosas y como las primeras soluciones válidas, e influyen mucho en la generación de las consiguientes ideas, con lo cual esta lluvia de ideas se convierte en una carrera de velocidad en lugar de calidad. El proceso de ideación se interrumpe mientras alguien expone su idea, ya que para el resto implica asimilar dichas nuevas ideas y procesarlas. En casi todas las organizaciones hay personas a quienes les gusta acaparar el tiempo de las reuniones y los más tímidos apenas participan. Estos últimos además no solo no se sienten confiados para aportar ideas, sino que no comentan las expuestas, con lo que se pierde su aportación. Es más difícil recordar todo lo expuesto, porque se suele hacer de viva voz y nuestra memoria pierde muchos de los detalles y algunas buenas ideas. Se pierde tiempo en obviedades, interrupciones, comentarios simples, en detrimento del tiempo para pensar y reflexionar. Al igual que se premia la rapidez, la cantidad suele ser más importante que su calidad, y muchas ideas son similares a otras. Por eso, Leigh Thompson y Loran Nordgren, profesores en la Kellogg School of Management, seguramente una de las universidades más prestigiosas de Estados Unidos en gestión empresarial, han propuesto un nuevo método con el que aprovechar esas reuniones de ideas: el denominado brainwriting o “escritura de ideas”. La primera y fundamental diferencia con el brainstorming es la separación del proceso de generación ideas del de valoración de las mismas. Para ello, en una primera etapa previa, los participantes escriben las ideas de forma individual y posteriormente se comparten y valoran con el resto. El método tiene, por tanto, dos etapas: Previo a la reunión: Invita a tu equipo: envía la pregunta o problema a los participantes en la reunión. Generar ideas individualmente y de forma anónima, para evitar la influencia de la jerarquía empresarial. Recopilar la ideas. Nordgen usa una aplicación gratuita llamada Candor, que ya se utiliza en empresas como Google o IBM; pero un papelógrafo o pizarra podrían servir también. Durante la reunión: Exponer todas las ideas. Cada persona habla de su idea brevemente y el resto escucha, de momento sin evaluar. Discutir sobre las ideas. Debate abierto, eliminando ideas no válidas, agrupando otras, mejorando las existentes y añadiendo las nuevas que surjan. Votar por las ideas, también de forma anónima; el propio Candor tiene un sistema para ello. Te sorprenderá, pero en apenas 20 minutos se puede hacer todo este proceso, lógicamente hay que sumar el tiempo previo de cada persona, pero sin duda produce un aumento en la productividad y calidad de las ideas. Foto: Pixabay Congreso ‘online’ gratuito sobre Negocios y Monetización DigitalGestión de crisis en redes sociales: cómo proteger nuestra marca
Telefónica Pymes AVISO: En Think Big Pymes nos trasladamos A partir de ahora, TODOS los contenidos del blog Think Big Pymes, se trasladan a la Comunidad Empresas, un espacio de referencia para la pequeña y mediana empresa, donde...
Íñigo Morete Ortiz Explora las novedades de Telefónica Open Gateway en su newsletter En la actualidad, acceder a información actualizada es un impulsor indispensable para el progreso empresarial, permitiendo que las empresas avancen de manera más ágil y eficiente. Hoy en día...
Telefónica Pymes Joinup, movilidad sostenible para empresas y empleados Los servicios de movilidad corporativa cada día toman una mayor relevancia en el panorama laboral, una oportunidad de negocio que hace más de una década detectaron Elena Peyró y...
Telefónica Pymes Transformando el calor en frío para ser más eficientes. El caso de Castellana de Carnes ¿Y si el sol pudiera convertir el calor en frío? Seguimos visitando empresas que ya han descubierto las grandes ventajas de pasarse a la energía solar. En esta ocasión...
Raúl Alonso ¿Estás preparado para cumplir con la nueva factura electrónica obligatoria? La obligación para pymes y autónomos de emitir facturas de forma electrónica o digital se demora hasta mediados de 2025. Cierto que aún queda tiempo para prepararse, pero aquellos...
Álvaro Álvarez ¿Cómo mejorar la protección de los datos personales de tus clientes? La protección de los datos personales de los clientes es una prioridad para las empresas. No solo por la obligación de cumplir con la jurisprudencia de la conocida LOPD...
Suena interesante, creo que esta técnica, ayudará a generar ideas de calidad aprovechando el tiempo. Responder
sin duda Elivar, lo que prima esta técnica es la mejora de la calidad en las ideas generadas Responder
Hay tormentas de ideas que terminan atormentando la generación de ideas. Entre más objetivo se vuelva el encuentro para definir una idea que desarrollar, mejor será el resultado sobre el problema a solventar. Esta técnica optimiza el tiempo y eso ya es bastante. Otro beneficio, tal vez oculto, es que al escribir las ideas, sus limitaciones y alcances, el enfoque se torna mucho más realista y metodológico. El semianonimato es también un beneficio, pues el ego y la jerarquización pueden coartar la participación y la objetividad en el reconocimiento de una idea, corrección o comentario. Responder