Decálogo para el éxito de una aplicación móvil

A razón de dos millones de descargas diarias, la app FIFA del Mundial de Brasil va camino de convertirse en una de las aplicaciones más exitosas del año (datos de Censuwide para Openwave Mobilty). Una muestra más del imparable ascenso de las apps, que en alianza con el smartphone y las tablets parecen ser las únicas amenazas al reinado de la web como canal dominante entre la marca y su audiencia en Internet.

En 2017 las descargas mundiales podrían alcanzar los 269.000 millones frente a las 102.000 millones de 2013, según estimación de Gartner. Se trata de un mercado de alta competición, ya que tanto en Apple App Store como en Google Play Store hace tiempo que la oferta pasó del millón de apps. Además, el 95% de la oferta será gratuita en tres años, según vaticina la citada consultora norteamericana. En conclusión, caminamos hacia un modelo diferente, en el que estos softwares instalados en nuestros terminales restarán tiempo a la navegación en el buscador y en la web.

De ahí la importancia de incorporar una verdadera estrategia móvil a nuestro marketing online, un paso más en esta continua adaptación al uso que de la tecnología hacen los clientes. Es cierto que, al menos de momento, no todas las empresas necesitan una app, pero es importante familiarizarse con las reglas del juego. Un tablero que dibujamos con la ayuda de Miriam Peláez, cofundadora de PickASO, agencia especializada en app Marketing, y directora de Marketing y Ventas de Ipadizate, web que a buen seguro conocerán todos los fanáticos del iPad.

Reflexión y previsión son las dos primeras palabras de Peláez. Reflexión en la decisión a la hora de sacar una app, de definir el modelo de negocio y de integrarlo en la estrategia general de la compañía. Y previsión, «para reservar una partida importante del presupuesto, sobre un 50%, en la promoción». Basado en su experiencia, ha resumido en un decálogo los pasos que hay que dar en el lanzamiento de una aplicación. Con su ayuda, los repasamos.

1.- Define el modelo de negocio

«Por qué queremos lanzar una app, qué retorno vamos a obtener y cómo la vamos a monetizar«. Si no tenemos respuesta a estas preguntas, es mejor volver al punto de partida. Una buena técnica es calcular el número de usuarios activos que necesitamos para alcanzar la rentabilidad, para lo que tendremos que saber el valor medio de retorno que cada usuario va a ofrecer en función del modelo de negocio elegido (el objetivo puede ser la venta, captar suscriptores, enviar tráfico a otra web, etc.) En todo momento debemos distinguir entre descargas y usuarios, entendiendo que estos últimos son los que pueden aportar valor a la acción.

2. Analiza tu competencia

«Debes tener claro si abres un hueco o vas a competir con otras y, en este caso, asegurarte de que no te lanzas a un mercado saturado». En opinión de Peláez, «cuando el segmento está cubierto, es muy complicado tener éxito», una recomendación a la que podemos poner nombre propio si pensamos en la mensajería instantánea.

3. Aporta valor con el dispositivo

La aplicación cobra mayor sentido cuando sabe integrar las funcionalidades del dispositivo donde se instala, terreno en el que gana al ordenador. Por eso las aplicaciones que utilizan en su operativa la cámara de fotos, el GPS, la llamada u otras funciones del móvil satisfacen más al usuario. «La app no debe ser una copia de nuestra página web», insiste Peláez.

4. Sé creativo y cuida el diseño

Además, es importante ofrecer un producto bonito, con diseño: «Lo feo no funciona». Un aspecto que comienza por el diseño de su icono, la parte más visible en la tienda, de lo acertado que sea dependerá un buen porcentaje de descargas.

5. Optimiza el desarrollo y la usabilidad

Es vital que desde la primera vez que el usuario entra, se ofrezca una navegabilidad amable e intuitiva. Los usuarios huyen de la dificultad, por eso se recomienda diseñar una app inicial muy sencilla -siguiendo el modelo de producto mínimo viable- y, si funciona, ir introduciendo nuevas funcionalidades con cada actualización.

6. Posiciona tu app en la tienda

Ya lo hemos comentado, si quieres descargas, debes trabajar el app marketing, para lo que hay que contar con un presupuesto significativo, sobre el 50% del total. Además deberás invertir en ASO (App Store Optimization), unas técnicas desarrolladas recientemente que vienen a ser el homólogo al SEO en buscadores, y que permiten dar más visibilidad en tienda al producto.

7. Integra la app  en el plan de marketing general

La aplicación no puede desvincularse de la estrategia general de la marca. Esto incluye desde su funcionalidad y diseño, acorde con la filosofía empresarial, a su promoción, que también debe utilizar los canales habituales de la organización. Sorprende ver cómo algunas marcas invierten en el diseño de una app para luego abandonarla a su suerte, sin ni siquiera utilizar canales tan accesibles como su web o puntos de venta físicos para darla a conocer.

8.- Incentivar al usuario móvil

Hay que dotar de actividad a la propia aplicación, de modo que incentive la funcionalidad para la que fue creada. Ya sea para generar leads (referencias para bases de datos) como para vender u otros objetivos, hay que ofrecer a los usuarios incentivos en forma de cupones descuento, promociones exclusivas y demás acciones de marketing que aporten valor y fidelidad a su uso.

9. Haz que sea social

«Todo debe ofrecer la posibilidad de ser compartido», resume Miriam Peláez, por lo que las redes sociales deben quedar perfectamente integradas en la app desde su primera versión.

10. Mide para analizar y evolucionar

La analítica de móvil debe convertirse en el más influyente consejero del lanzamiento, lo que no siempre ocurre en opinión de Peláez: «La falta de medición es uno de los grandes problemas. Hay muchas empresas que no lo hacen, y sin medición no hay decisión ni margen de mejora».