Ventajas e inconvenientes de financiarse con una cuenta de créditoMario Cantalapiedra 11 febrero, 2016 La cuenta de crédito es un producto financiero ideado para actuar como colchón de tesorería, es decir, sirve para financiar el tiempo que transcurre desde que una empresa paga a sus proveedores y resto de acreedores hasta que cobra de sus clientes. Precisamente por el hecho de que a las pymes les suele caracterizar el pagar pronto y el cobrar tarde, suele ser un producto muy demandado por ellas. Mediante la cuenta de crédito, una entidad financiera concede a una empresa el derecho a disponer de una cantidad de dinero durante un período de tiempo, a cambio del cobro de unos intereses y unas comisiones. Durante ese plazo, la empresa puede hacer uso o no del dinero, según le convenga y siempre que no se sobrepase el límite concedido. Luego, a diferencia de otros productos como el préstamo, donde la entrega del dinero se hace de una sola vez y se pagan intereses sobre la totalidad de los fondos prestados, en la cuenta de crédito se abonarán intereses solamente por la cantidad dispuesta, aunque, como explicaré posteriormente, suele establecerse también una comisión sobre la cantidad no dispuesta. Además, el crédito permite reutilizar los fondos, durante el plazo de tiempo pactado, en la medida en que la empresa vaya reintegrando las cantidades dispuestas. Normalmente se concede por períodos anuales, incluyendo, en ocasiones, la posibilidad de renovarse una vez que llega su vencimiento. En el supuesto de no renovación, deberás reintegrar a la entidad financiera el importe total concedido en la fecha de vencimiento, aunque a veces es posible pactar una reducción progresiva del crédito. Si en tu empresa la actividad es cíclica o de temporada, como ocurre en las actividades agrícolas o textiles, puedes negociar con el banco lo que se conoce como “crédito de campaña”, el cual tiene la particularidad de poder amortizarse al mismo tiempo que cobras la facturación de dicha campaña. La operación de crédito se formaliza mediante un documento mercantil denominado “póliza de crédito”, la cual es intervenida por un fedatario público (corredor o notario de comercio), y en ella la entidad financiera suele exigir algún tipo de garantía que le asegure el riesgo. Esta garantía, que tantos problemas suele ocasionar a las nuevas empresas o a las que tienen estructuras financieras débiles, puede ser de tipo personal, donde es el patrimonio global de la empresa o de un tercero vinculada a ella el que avala la operación; o de tipo real, donde el crédito es garantizado mediante un bien mueble (por ejemplo, una máquina) o inmueble determinado. Si garantizas la cuenta de crédito con un inmueble, te verás obligado a formalizar la operación en escritura pública. En el día a día, la operativa de la cuenta de crédito es muy similar al de una cuenta corriente, pudiendo realizarse tanto ingresos como disposiciones. A la hora de disponer de los fondos, podrás hacerlo a través de los instrumentos habituales de las cuentas corrientes, tales como cheques, pagarés, tarjetas o transferencias, siendo también posible domiciliar adeudos directos, impuestos o efectos comerciales. De un modo general, encuentro las siguientes ventajas y los siguientes inconvenientes de financiarse a través de una cuenta de crédito: Ventajas La principal ventaja es la flexibilidad de la operación, que te permite hacer uso o no del límite del crédito a tu conveniencia. El abono de intereses solamente lo realizarás por la parte del dinero de la que vayas disponiendo. Al funcionar como una cuenta corriente, es un producto pensado para el día a día de tu empresa, que te permite canalizar la operativa habitual de cobros y pagos. Inconvenientes Es una financiación difícil de conseguir sin la aportación de garantías que avalen el dinero, sobre todo para las empresas más nuevas o con una estructura de balance más débil. Suelen incluir una comisión por disponibilidad que te obligará a planificar con una mayor precisión la necesidad de crédito durante el período. La denominación de esta comisión no debe llevarte al equívoco; la entidad financiera te la cobra por solicitar unos fondos y “no disponer” de ellos, por lo que realmente lo que hace es compensar su coste de oportunidad (si el dinero está disponible para ti, aunque no lo uses, no puede prestárselo a otro cliente). Foto: pixabay La marca personal y el síndrome de SolomonApps para celebrar San Valentín con solo un clic
Telefónica Pymes AVISO: En Think Big Pymes nos trasladamos A partir de ahora, TODOS los contenidos del blog Think Big Pymes, se trasladan a la Comunidad Empresas, un espacio de referencia para la pequeña y mediana empresa, donde...
Íñigo Morete Ortiz Explora las novedades de Telefónica Open Gateway en su newsletter En la actualidad, acceder a información actualizada es un impulsor indispensable para el progreso empresarial, permitiendo que las empresas avancen de manera más ágil y eficiente. Hoy en día...
Telefónica Pymes Joinup, movilidad sostenible para empresas y empleados Los servicios de movilidad corporativa cada día toman una mayor relevancia en el panorama laboral, una oportunidad de negocio que hace más de una década detectaron Elena Peyró y...
Telefónica Pymes Transformando el calor en frío para ser más eficientes. El caso de Castellana de Carnes ¿Y si el sol pudiera convertir el calor en frío? Seguimos visitando empresas que ya han descubierto las grandes ventajas de pasarse a la energía solar. En esta ocasión...
Raúl Alonso ¿Estás preparado para cumplir con la nueva factura electrónica obligatoria? La obligación para pymes y autónomos de emitir facturas de forma electrónica o digital se demora hasta mediados de 2025. Cierto que aún queda tiempo para prepararse, pero aquellos...
Álvaro Álvarez ¿Cómo mejorar la protección de los datos personales de tus clientes? La protección de los datos personales de los clientes es una prioridad para las empresas. No solo por la obligación de cumplir con la jurisprudencia de la conocida LOPD...
Artículo útil. El financiamiento a través de una cuenta de crédito puede ser beneficioso para muchas compañías, especialmente al inicio de este desarrollo de negocios. Pero lo principal es utilizar esta financiación correctamente. Creo que este tipo de financiamiento es una gran opción para financiamiento adicional. Dado que si utiliza el préstamo como la financiación principal, deberá obtener un préstamo de un banco o de una empresa privada por una gran cantidad. Como se describe en el artículo, será muy difícil obtener un préstamo por una gran cantidad sin garantizar las inversiones. Por lo tanto, antes de tomar un préstamo como financiamiento, es muy importante calcular todos los riesgos y decidir si puede pagar el préstamo. Cuando abrí mi propio negocio, usé el crédito como financiamiento adicional. Esto me permitió usar el dinero de manera eficiente y pagar el préstamo muy rápidamente. Responder