Aunque suelen ir de la mano, la innovación y la tecnología no son la misma cosa, pero si están emparentadas y se relacionan con el éxito empresarial. Aun así, la pregunta subsiste, ¿cómo innovar? y más específicamente, ¿cómo innovar usando la tecnología?
Comencemos con las definiciones, según la Real Academia de la Lengua Española, la innovación consiste en: “mudar o alterar algo, introduciendo novedades”.
En términos más aplicados a los negocios se dice que la innovación es la introducción al uso de un producto (bien o servicio) o de un proceso nuevo o significativamente mejorado; o la introducción de un método de comercialización o de organización nuevo aplicado a las prácticas de negocio.
Es tan importante que en el mundo corporativo se habla de innovation management que, según Gartner es la gestión de la innovación como una disciplina empresarial, cuyo objetivo es impulsar un proceso o una cultura repetible y sostenible dentro de una organización.
Ahora bien, ¿cómo se hace?
Primero la estrategia
Y no es solo cuestión de dinero y recursos, para la muestra empresas que antes eran líderes como Polaroid, Nokia, Sun Microsystems y Yahoo, entre otras, se quedaron atrás. Lo más importante en este campo es la estrategia.
Pero ¿qué es la innovación en sí? No es más que un compromiso con un conjunto de políticas que se refuerzan mutuamente para alcanzar un objetivo específico.
En el mundo corporativo, la inmensa mayoría de organizaciones tienen estrategias de negocios con metas específicas en mercados, productos, audiencias, etc. Con la innovación se debe realizar algo similar buscando objetivos claros como lanzar un nuevo producto, rejuvenecer la marca o aumentar el margen entre otras posibilidades. Más aún, las directivas deben hacerse preguntas claras como:
- Razones para innovar: ¿Por qué innovar?
- Resultados que se desean obtener: ¿Qué se espera de innovar?
- Enfocar los esfuerzos: ¿En qué áreas se desea innovar?
- Intensidad y nivel de riesgo: ¿Cuánto se desea innovar?
Con base en estas inquietudes se crea una estrategia, un cronograma y un equipo responsable, todo encabezado por la gerencia.
Innovación y tecnología
La tecnología es una herramienta, pero también es una plataforma y sobre esta se potencia la innovación.
Para la muestra basta con mirar tecnologías como el Blockchain y ver lo que la comunidad de desarrolladores está creando con esta: contratos inteligentes, NFT, comercio en el metaverso, etc.
Lo mismo sucede con la realidad aumentada y virtual, y con las plataformas low code, entre muchas otras iniciativas. Porque la innovación hace años dejó de ser exclusiva de los departamentos de tecnología de las empresas y se ha mudado a las comunidades.
Por ello, las empresas deben mirar a la tecnología como un catalizador, pero no como un objetivo en sí misma. Y sobre todo deben estar abiertas al cambio donde quiera que se manifieste, ya sea desde los usuarios, socios de negocios, la misma competencia o incluso los empleados.
Foto de Jason Goodman en Unsplash