Dicen que es el “economista del talento”. Presidente de About my Brain Europe, socio director de IDEO y consejero de Human Age Institute, Juan Carlos Cubeiro atesora un currículo con un larguísimo etcétera.
En “Del capitalismo al talentismo”, uno de los más de 50 libros que ha escrito sobre liderazgo y managament, ofrece las claves para triunfar en la nueva era, donde el talento será una piedra angular como auténtico motor de la economía.
Cubeiro encadena titulares que engrasa con frases y cifras extraídas de las lecturas que devora a diario. Asegura que, en España, “el 40% de las personas aún no ha descubierto su talento”, es decir, la conjunción entre lo que nos apasiona (solo uno de cada seis españoles lo sabe), lo que se nos da bien y lo que se demanda en el mercado.
Consultor desde hace más de 30 años, ha trabajado para más del 80% de las 500 principales compañías del mundo. Una experiencia que le lleva a afirmar, sin titubeos, que el gran problema en nuestro país es la calidad directiva, categoría en la que ocupamos el puesto 43.
Pero si esa posición resulta manifiestamente mejorable, mucho peor es la relativa a la captación de talento, en la que caemos en picado hasta el puesto 116 del ranking.
Y para hablar precisamente del talento, el próximo 25 de marzo Cubeiro participará en el evento online Ahora_Personas, con la ponencia «Habilidades de liderazgo para afrontar los nuevos retos». Para registrarse, solo es preciso cumplimentar un breve formulario e inmediatamente recibiréis la confirmación por correo electrónico.
Selección de talento en las pymes
“Las pymes no saben seleccionar el talento que necesitan”, aunque en muchos casos sea una cuestión de «vida o muerte», como lo demuestra el hecho de que en los últimos 50 años la mortalidad de las compañías se ha quintuplicado.
Y en este contexto, son las personas talentosas las que actúan como garantes del éxito, cuando no de la supervivencia, de las empresas. Ahora bien, ¿qué cualidades deben reunir estos hombres y mujeres?
Un 90% del talento es inteligencia emocional, por lo que la gestión de las emociones resulta determinante. Además, tienen que elegir metas, manejar información y actuar. Porque, como ya dijo Woody Allen: “Las cosas no se dicen, se hacen, porque al hacerlas se dicen solas”.
En definitiva, el talento se compone de aptitudes y actitudes. Y, por supuesto, de compromiso con la empresa.
Estas personas cada vez buscan más proyectos ilusionantes en los que predominen las aspiraciones, en detrimento de los miedos. Al talento lo mueven la colaboración, el equipo, el sentirse bien y realizado, el liderazgo, la ilusión… y las buenas personas.
Liderazgo brain-friendly
En su último libro, escrito a cuatro manos junto a Silvia Damiano, habla sobre el liderazgo brain-friendly y detalla los nueve hábitos de una mente eficaz. Y es que, en su opinión -en línea con la de Aristóteles, su coach favorito-, la excelencia no es un acto, sino un hábito.
El libro se presenta como una guía para convertirse en un líder del siglo XXI. Y recoge:
- Hábitos de dirección, para activar el propósito, elegir lo que se piensa y visualizar lo que se conseguirá.
- Hábitos de cuidado, para relajar la mente, alimentar bien al cerebro y practicar ejercicio.
- Hábitos de desarrollo, para deshacerse de las personas tóxicas, contagiar el optimismo inteligente y aprender continuamente.
Carencia de buenos líderes
En opinión de Cubeiro, hoy en día estamos faltos de buenos líderes en el terreno político, empresarial y educativo. Personalmente, es defensor del liderazgo femenino, lo que no implica que deban ser mujeres las que lo ejerzan. Y de medir y analizarlo cualitativa y cuantitativamente.
Más allá de las características tradicionales (en torno a las ideas, el proyecto, las metas, los propósitos…), destaca la importancia de la inspiración a la hora de liderar. “Hay que enamorarse, no asustarse. Necesitamos líderes más integradores, imaginativos e intuitivos”, apostilla.
Hacia un mundo meritocrático
Cubeiro carga sobre sus espaldas más de dos décadas de trayectoria como profesor de la Universidad de Deusto y en diversas escuelas de negocio. ¿Cómo ve este conferenciante, ensayista y divulgador el nuevo mundo?
«Debemos caminar hacia un mundo meritocrático. Creo mucho en el poder de Europa, porque el talento se siente más cómodo en países que ofrecen cierta seguridad, equidad y un mejor modo de vida. El modelo del capitalismo salvaje se está extinguiendo. Y si aprovechamos la tecnología, seremos un contrapunto entre China y Estados Unidos. En el equilibrio, como decía Aristóteles, está la virtud. Y ahí tiene mucho que decir Europa”.
La apuesta por el aprendizaje
Juan Carlos Cubeiro dedica casi la mitad de su tiempo a la learnability o, dicho de otro modo, a aprender. Afirma que el 90% del aprendizaje depende de la seriedad con la que se lo tome el líder. Y remarca que ese aprendizaje es lo más importante para el porvenir de una empresa.
“No hay que adaptarse, porque si tratas de adaptarte es que llegas tarde. Hay que anticiparse. Y eso se logra a través del liderazgo, tanto en la dirección ejecutiva como en los equipos de trabajo. El cerebro es plástico, por lo que a cualquier edad se puede seguir aprendiendo”, sostiene.
Asegura que para aprender hay que desaprender y reaprender. Olvidar lo que no funciona y salir de la zona de confort, aprovechando la tecnología sin dejar que esta decida por ti.
«Lo más importante que se puede aprender en la vida es a querer y a ilusionarnos con el futuro. En lugar del miedo, debería imperar la libertad y la responsabilidad. Al final, la parte afectiva es la más efectiva», concluye.