Muchas veces, detrás de una gran idea, lo que encontramos es un espíritu inconformista. Y este es el caso de Sepiia y su fundador, Federico Sainz, un joven ingeniero que, tras varios años colaborando con el centro tecnológico textil AITEX, dentro del departamento de Innovación en Moda, se preguntó: “¿Por qué la innovación en la moda no puede llegar a la ropa que la gente viste en su día a día?
Una pregunta, un reto y una respuesta: Sepiia, la empresa española que ha revolucionado nuestro fondo de armario con tecnología.
Ropa inteligente
Moda inteligente, diseñada para la vida o, lo que es lo mismo, camisas, polos y corbatas que no se arrugan, no se manchan, no huelen y además son fabricadas de forma sostenible.
¿El secreto? La propia fibra textil con la que fabrican sus prendas, que incorpora en el interior partículas de plata muy pequeñas, que evitan, entre otras cosas, la proliferación de las bacterias causantes del mal olor.
¿Cómo y cuándo surge Sepiia?
Sepiia nace en el año 2016 como respuesta a un mercado de moda inundado de prendas de vestir muy poco funcionales, y unos desarrollos tecnológicos dentro del sector textil que nos hacían ver que las cosas se podían mejorar mucho: prendas que requieran menos cuidado, que aporten más confort y, por supuesto, mucho más sostenibles.
¿A quiénes habéis recurrido para financiar vuestra idea?
La idea nace dentro de la aceleradora Lanzadera, en Valencia, que nos apoyó durante los dos primeros años. Junto a ellos elaboramos los primeros prototipos y armamos el plan de negocio.
Posteriormente, nos acogieron en el Campus Google for Startups, donde estuvimos siete meses en su programa Residency, de donde sacamos aprendizajes muy valiosos que nos ayudaron a formar una estructura sólida de empresa. Hoy en día, nos encontramos en La Nave, aceleradora del Ayuntamiento de Madrid, donde seguimos creciendo y solidificando nuestro negocio.
Lanzadera, Google Campus, La Nave… ¿Qué valor aportan este tipo de plataformas?
Las aceleradoras están cambiando el panorama emprendedor, ya que gracias a ellas personas como nosotros, con mucha formación en producto, pero escasa formación empresarial, hemos podido desarrollar un modelo de negocio sólido con el que competir en un mercado siempre hostil hacia nuevas propuestas.
Además, en nuestro caso, contamos con una financiación que fue fundamental para poder dar los primeros pasos hasta empezar a monetizar el producto gracias a las ventas de nuestros clientes. Siempre estaremos agradecidos por todo lo que aprendimos con ellos, así como por la calidad humana de todo el equipo.
¿Cómo se une la tecnología al confort y el diseño?
La tecnología ha evolucionado de manera espectacular en los últimos años. Los avances en materiales y procesos han conseguido crear nuevos productos con capacidades asombrosas.
La industria textil ha evolucionado también, dando lugar a nuevos tejidos y materiales de altas capacidades, especialmente dirigidos a industrias muy técnicas como el deporte, el sector aeroespacial, la biotecnología o las prendas para militares.
A pesar de que estos nuevos materiales ya son una realidad, todavía estos desarrollos no han sido trasladados a las prendas de vestir de uso diario, sino que permanecen en los entornos de uso más técnicos.
Nuestro objetivo es llevarnos toda esta tecnología al usuario medio, trasladando las funcionalidades y capacidades de los nuevos materiales a la ropa de calle con una misión clara: generar prendas de vestir para uso diario que, gracias a la tecnología, aporten confort y requieran menos cuidado, siendo producidas de la manera más sostenible posible.
Esto lo hemos hecho posible gracias a una alineada red de proveedores altamente especializados, con los que fabricamos las prendas desde el origen: el material que usamos para fabricar el hilo con el que hacemos nuestros tejidos y prendas.
Creemos que hacer otro tipo de prendas, centradas en añadir valor a la ropa, es posible, y por eso trabajamos para ofrecer prendas más funcionales y sostenibles sin dejar de lado el diseño y la creatividad. Moda y tecnología van de la mano para adaptarse a los nuevos obstáculos con los que nos encontramos hoy en día, a causa del cambio de paradigma que vivimos a nivel global.
¿Consideráis que la I+D en España se salva gracias a la iniciativa privada?
Nuestra iniciativa, sin la aportación de las empresas privadas que nos ayudaron en el comienzo nunca hubría visto la luz. Sin embargo, hay que reconocer que el Estado también hace aportaciones en forma de ayudas o subvenciones que son muy útiles para poder progresar.
A nosotros nos acaban de conceder una ayuda CDTi Neotec que nos va a permitir seguir desarrollando nuevas tecnologías para el futuro.
Lo mejor, intentar no depender de nadie y valerte de tus propios clientes.
¿Es difícil emprender en España?
Cualquiera que emprenda sabrá que no es un camino fácil. Nunca hemos emprendido en otros países, por lo que no podríamos comparar lo fácil o difícil que es emprender en España. Lo que sí sabemos es que hemos trabajado muy duro para llegar a donde estamos y seguiremos haciéndolo en el futuro para seguir creciendo.
¿Qué papel juegan para vosotros Internet y las redes sociales?
Somos una marca nativa digital, lo que significa que sin Internet nuestro modelo de negocio (vendemos las prendas a través de nuestra tienda online), nunca hubiese existido.
En cuanto a las redes sociales, son una herramienta que nos permite conectar con nuestros clientes, estén donde estén, de una manera efectiva, rápida y a un coste asumible.
¿Qué consejos daríais a quienes tengan una idea de negocio y quieran emprender?
Que fallen rápido, que validen todo el tiempo y, lo más importante, que tengan siempre a su cliente en el centro. Sin clientes, no hay negocio, por lo que es esencial saber qué quieren para poder ofrecérselo.