Cuando llegó el confinamiento, Antonio y Pablo Jordán, propietarios de Jordán Joyeros en Valencia, pudieron comprobar la importancia de la transformación digital para mantener vivo su negocio.
Una tradición y experiencia familiar de casi de 70 años en el mundo de la joyería no habría sido suficiente para evitar un cierre total de su negocio. Pero ellos ya habían avanzado en el desarrollo de un modelo de e-commerce apoyado por una web y sus redes sociales.
Estos pasos les permitieron mantener abierta la tienda online, poder mostrar sus productos y mantener un contacto directo con sus clientes durante el estado de alarma.
La experiencia y aprendizajes de Jordán Joyeros nos ayudan a entender la importancia del desarrollo de unas competencias y plataformas digitales que han apoyado la actividad de su fábrica y tienda.
Y es que estar digitalizados les ha permitido sufrir menos daños en estos complejos momentos y, a largo plazo, encontrar nuevas vías de negocio y obtener un mayor conocimiento de su competencia y clientes.
En el siguiente vídeo nos cuentan cómo fue el proceso y cómo han conseguido no dejar de vender en ningún momento y hacer muchas más ventas de las que esperaban. Porque, aunque tenían la fábrica cerrada, ellos «estaban presentes en la casa de sus clientes» a través de la web y eso ha hecho que la gente no se olvidara de ellos y siguiera comprando sus productos.
Imagen: jordanjoyeros.com