«Acelerar el proceso de digitalización». La consigna ha sido invocada por los gurús de la gestión, para que las empresas reubiquen su modelo en el nuevo escenario pos-COVID. Pero la advertencia sería más efectiva si llegara acompañada de recomendaciones más específicas: ¿en qué tecnologías deben invertir las empresas?
La respuesta se estructura en cinco puntos: vender en línea, protegerse frente al cibercrimen, contratar servicios en la nube, emplear la analítica de datos para conocer al cliente y adaptarse para el teletrabajo.
Estos son, en opinión de la consultora de innovación Nuvix, “los cinco cambios más demandados a nivel global por las empresas que desean transformar su modelo de negocio para adaptarlo a la nueva normalidad”. Cinco tecnologías cuya inversión es susceptible de ser valorada por cualquier empresa que quiera.
Tecnología para salir de la crisis
Seis de cada diez empresas consideran la inversión en tecnología como la vía más útil para superar la crisis.
El dato lo aporta el Barómetro para la reactivación económica de empresas y trabajadores, del Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (IVIE). De las 800 empresas y autónomos participantes en el estudio, el 32% marcó la inversión en formación como la segunda vía más interesante, mientras otro 24,8% apostaba por la innovación para remontar la crisis.
Ya lo ha conseguido el 23,5% que afirma llegar al primer semestre de 2021 con una facturación superior a la previa al coronavirus. Sin embargo, el 15,8% espera cruzar el Rubicón en la segunda mitad de este ejercicio, mientras el 34,2% lo hará a lo largo de 2022 y el 16,8% más tarde.
En qué tecnologías deben invertir las pymes
La cuestión es detectar qué áreas tecnológicas son las que pueden ofrecer un mayor retorno a la inversión realizada por la empresa, en este esfuerzo por convertir su digitalización en palanca de supervivencia o competitividad. La recomendación de los expertos de Nuvix apunta a cinco áreas.
1. Plataforma de comercio electrónico
El confinamiento dejó claro que la venta en línea es algo más que el capricho de sumarse a una tendencia; es -como ha quedado patente- una tecnología clave para las empresas. Durante unos meses casi el 100% del negocio de muchas pymes españolas se trasladó a los canales digitales, pero las cifras del conjunto del año son incluso más reveladoras.
En 2020, el volumen de venta del comercio electrónico de las siete mayores economías del mundo pasó del 16% al 19%, según concluye un reciente informe de Comercio y Desarrollo de la ONU (UNCTAD, en sus siglas en inglés).
“Estas cifras implican que, con independencia del sector en el que se encuentre, si un negocio no tiene un servicio de comercio electrónico, puede perder un nicho de ventas bastante importante”. Y Nuvix afianza su afirmación con un recordatorio revelador: “Esto es especialmente relevante en España, donde solo el 15% de las pymes afirma utilizar el comercio electrónico”.
2. Aumento del nivel de ciberseguridad
La rápida digitalización a la que un largo año de pandemia ha obligado a muchas pymes, no siempre ha sido acompañada de un plan de seguridad informática. Quizás porque muchas empresas consideran que por su reducido tamaño no son objetivo del ciberdelito, creencia que los datos de la Guardia Civil contradicen: el pasado año el 70% de los ataques a la ciberseguridad se produjeron en entornos pymes.
La advertencia también llega desde Nuvix: “La falta de experiencia en Internet de estas corporaciones las hace objetivos más atractivos para los cibercriminales, llegando a conseguir miles de euros en cada ataque. Tal es así que cada día se producen 350.000”.
3. Servicios cloud para agilizar la digitalización
Abrazar nuevas herramientas como la nube dinamiza la digitalización de las pymes. Según un estudio global de la consultora McKinsey, “el 45% de las empresas que aplican tecnologías cloud para procesar datos ha logrado una mejor experiencia del empleado en este proceso de transformación digital, frente al 34% de las organizaciones que no ha utilizado estas herramientas”.
Desde Nuvix señalan que “la nube es también una buena oportunidad de crecimiento y diferenciación para las pymes en España, donde solo un 14% de ellas afirma utilizar este tipo de soluciones”.
4. Big data para conocer mejor al cliente
Ubicar al cliente en el centro de la estrategia ha sido una de las grandes enseñanzas empresariales de los últimos años, y monitorizarle para conocerle y anticipar sus cambios, una auténtica obsesión. En este empeño, el análisis de datos es la tecnología más eficiente.
“Sin embargo, es preciso configurar estas herramientas para que ofrezcan información útil con la que responder a las necesidades y demandas del cliente”, explican los expertos de Nuvix. Y es que, según cita de un estudio de Deloitte, dos de cada tres consumidores estadounidenses afirma que como mucho solo la mitad de la información que la empresa maneja sobre él es cierta.
5. Adaptación al teletrabajo
La OIT (Organización Internacional del Trabajo) estima que el 27% de los trabajadores en los países desarrollados trabajará desde su casa tras el fin de la pandemia. Por el contrario, David Michael, CEO de Goldman Sachs, señala que la prioridad es volver al puesto de trabajo.
Nadie sabe hasta qué punto el teletrabajo es una realidad temporal o se consolidará tras la pandemia, pero resulta descabellado no estar preparado. Un paso que tan solo ha dado el 14% de las pymes, según Nuvix.