Hacer todo lo posible por salir el primero en buscadores nunca dejará de tener sentido. Sin embargo, últimamente parece que Google nos haya tomado la medida, porque las prácticas tradicionales para mejorar el SEO (Search Engine Optimization) están empezando a dejar de funcionar como antes.
Hasta hace poco, posicionarse mejor haciendo SEO iba de calzar una serie de palabras clave en determinados puntos de nuestro contenido para asegurarnos todos los enlaces de vuelta (backlinks) posibles. Sin embargo, a pesar de que el 57% de las marcas todavía apuesta por el SEO tradicional como estrategia más importante para la generación de leads, empieza a tomar cuerpo una visión más holística del mismo que intenta seguir las huellas de los cambios en Google.
Porque Google, que quiere poner su foco en orientar a seres humanos de carne y hueso, mejora a marchas forzadas sus algoritmos, incorporando todo lo que sabe sobre nosotros y todo lo que hemos hecho en el pasado. Y como bien han entendido ellos, las personas no funcionamos como las máquinas, de ahí que tal vez ese “SEO estructural” que hoy conocemos tenga sus días contados.
Yo creo que el SEO o, dicho en plata, “salir bien en la foto del buscador”, es un concepto que está vivo y coleando. Que ni ha muerto ni tiene intenciones porque ¿qué negocio no aspira a estar en el pódium? Pero como todo está cambiando, sería bueno empezar a ver el SEO con un enfoque completamente nuevo.
Google siempre ha querido que los sitios web que mejor te encajan aparezcan en la parte superior de tu búsqueda. Y cada vez más tiene la tecnología para hacerlo, ¿o no te has fijado que dos personas que realizan la misma búsqueda obtienen resultados diferentes?
¿Cuáles serán las claves de este nuevo SEO?
1. El contenido es el rey
A pesar de que el 80% del contenido que se escribe no llega a leerse nunca, el nuevo SEO está impulsado por el contenido. Por eso se ha puesto tan de moda el inbound marketing, que no es otra cosa que tratar de captar la atención del consumidor a base de ofrecerle, no un producto o servicio como hemos hecho siempre, sino un contenido de valor para él.
El razonamiento es claro. Cuanto más valor aportes, más gente irá a tu página web y si eso ocurre, Google se lo apunta. Te empieza a considerar relevante. Aunque para que eso ocurra, tienen que enfocarte. Es muy difícil hacer popular un contenido que no tiene un objetivo claro. Y aquí es cuestión de tácticas, pero yo creo que es mejor dirigir tu contenido a un nicho específico asumiendo que no vas a llegar a todos. Te traerá menos tráfico, pero serás más relevante dentro de tu subsegmento. Mucho tráfico no necesariamente implica más ingresos. Y en cuanto al tipo, tanto el tema como el formato óptimo dependerán de este público objetivo. Además de observarles, tal vez sea buena idea preguntarles si prefieren imágenes, infografías, vídeos o posts.
2. Incorpora las redes sociales
Desde que Google incorporó a Twitter en sus resultados de búsqueda, se ha creado una nueva relación entre el SEO y las redes sociales. Y es que los medios de comunicación social le sirven como termómetro para saber qué y cómo se busca en la Red.
Y como la única manera de tener éxito en los medios sociales es aportar valor cubriendo las necesidades de tus clientes, si no encuentras el modo de hacerlo, nunca vas a “subir puntos” en el ranking del buscador.
Por ello, es fundamental integrar cualquier acción que hagas en tu site con las que hagas en tus redes sociales. En el fondo, el trabajo se reaprovecha, porque el motor de ambas estrategias no es otro que el contenido. Aunque el acento en medios sociales sea la construcción de relaciones estables con tus clientes para armar una comunidad de valor que atraiga a nuevos seguidores.
3. Olvida la automatización
Salir bien parado en este nuevo contexto está alineado con la creación de una auténtica conexión con tu público objetivo. Este y no otro es el secreto de la popularidad, y no dudes de que Google se dará cuenta. Por ello, la buena o mala noticia es que están quedando atrás los días en que, para verse subir como la espuma, bastaba con encargar a casi cualquiera artículos rellenos de palabras clave al peso. El proceso es más lento y requiere mucho esfuerzo.
Yo creo que cada vez funciona menos eso de ponerse en modo robot a construir frases con keywords. Cada vez más lo que funciona es la naturalidad, el contenido y la presencia que genera relación. Sí o sí hay que estar presente, ya sea en la web, en la tienda o en las redes sociales. Y esto sólo pueden hacerlo las personas. Tendrás que dedicar recursos a ello, créeme que será una inversión que valga la pena.
Concluyo con un rotundo sí al SEO. Ni está muerto ni va a estarlo, pero parece que las reglas de juego están cambiando. Y habrá que ponerse rápidamente a ello… ¿Estás ya pensando cómo va a responder tu negocio a este nuevo desafío?
Foto: Vasco Solutions