El derecho sobre la propiedad de tu marca comienza cuando la registras. Muchos empresarios no son conscientes de que, tras lustros trabajando para imponer su marca como marchamo de calidad, otra firma de la competencia puede empezar a utilizar el mismo o similar nombre, porque nunca llegó a ser registrado. Es una práctica poco ética, pero puede representar un problema si la empresa no ha tenido la precaución de proteger su marca.
Inscribir la empresa en el Registro Mercantil es imprescindible para poder operar, pero en ningún caso da la titularidad de marca sobre un producto o servicio, ni sobre una zona geográfica, ni siquiera sobre los dominios de Internet o los nombres de usuarios para redes sociales.
Lo contrario ocurre cuando ese nombre está debidamente registrado como prevé la Ley de Marca que el pasado 14 de enero de 2019 entró en vigor, modificando parcialmente la Ley 17/2001 de 7 de diciembre. Te contamos todo lo que debes saber para proteger una seña de identidad única.
¿Qué es una marca?
Esta es la explicación que da la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM):
Es un título de propiedad industrial que da a su titular el derecho a actuar frente a terceros que copien, falsifiquen, fabriquen, importen o vendan los productos o servicios cubiertos por dicha marca sin su consentimiento.
Por tanto, su registro -aunque no es obligatorio- es muy recomendable, porque es un elemento distintivo de protección y de expansión internacional.
Distinción entre marca y nombre comercial
Es importante entender los conceptos de marca y nombre comercial. El nombre comercial no representa a un producto o servicio, sino que “sirve para identificar las actividades que desarrolla una empresa en el tráfico mercantil y diferenciarla del resto de empresas del mismo o diferente sector”.
De este modo, una empresa puede haber dado de alta en la OEPM un único nombre comercial y varias marcas para identificar sus distintos productos o servicios. Además, el nombre comercial solo se puede proteger por país y de acuerdo con la norma que rija en cada uno de ellos.
Tipos de marcas
Uno de los objetivos de la nueva Ley de Marcas de 2019 fue la ampliación de los elementos susceptibles de proteger, dando la posibilidad de registrar un mayor rango de elementos diferenciales de las empresas, como envases o combinaciones de imagen y sonido.
En la actualidad, las marcas que se pueden registrar en la OEPM son:
- Denominativa: la formada exclusivamente por palabras o letras, números en caracteres estándar, y sin características gráficas de disposición ni color.
- Figurativa: formada por palabras, letras o números con caracteres, estilización o disposición no estándar, con o sin elementos gráficos o de color o que estén exclusivamente formadas por elementos gráficos.
- Tridimensional: consiste en una forma tridimensional, por ejemplo, para envases, envoltorios o la propia forma del producto.
- De posición: la manera específica en que la marca se coloca o figura en el producto.
- Patrón: conjunto de elementos que se repiten periódicamente.
- Color: un solo color sin contornos o una combinación de colores con contornos.
- Sonora: cuando se registra exclusivamente un sonido o combinación de sonidos.
- Movimiento: movimiento o cambio de posición de los elementos de la marca.
- Multimedia: combinación de imagen y sonido.
- Holograma: elementos con características holográficas.
- Otros: marcas que no estén cubiertas por ninguno de los otros tipos de marcas.
¿Dónde se puede registrar una marca?
Como ya se ha señalado, dirigiéndose la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM), aunque también es posible realizarlo en cada uno de los Centros Regionales de Información en Propiedad Industrial, o en las oficinas de Correos (por carta certificada y con acuse de recibo) y por Internet a través de la web de la OEPM, en este último caso con un descuento del 15%.
Para obtener la autorización de registro, es imprescindible que no exista coincidencia o similitud con otras anteriores.
Para evitar la negativa a la solicitud, lo mejor es consultar previamente las bases de datos de la OEPM, que son totalmente gratuitas. Para agilizar todo el proceso y abordarlo con mayores garantías de éxito, se pueden contratar los servicios de las agencias de Propiedad Industrial.
¿Cuánto cuesta solicitar una marca?
El coste va a depender del número de clases que se soliciten, existiendo 34 diferentes clases para productos y 11 para proteger los servicios, según la conocida como Clasificación de Niza. El coste medio para la primera clase es de 150 euros.
¿Por cuánto tiempo puedo registrar una marca en España?
La OEPM concede su protección por periodos de 10 años, que pueden prorrogarse indefinidamente con cada renovación. Los derechos se pierden por impago de la renovación.
¿Cómo puedo proteger la marca en otros países?
Para extender internacionalmente la protección de una marca existen dos vías:
- Marca de la Unión Europea, que facilita con una única gestión la protección en todos los países miembros. En la actualidad muchas empresas solicitan este registro para asegurar su protección en este espacio comercial, si bien la coincidencia de marca en cualquiera de estos países puede impedir su concesión.
- Marca internacional: garantiza la protección en los 116 países miembros del conocido como Sistema de Madrid. Para realizar este trámite, es imprescindible contar previamente con un registro de marca nacional o marca de la Unión Europea.