En 1984, John Gage de Sun Microsystems inventó un eslogan que marcó una era: “The Network is the Computer», una premisa que décadas después, con la computación en la nube y ahora con el Compute as a Service, parece más vigente que nunca.
Y es que el modelo de las centrales de cómputo con terminales menos poderosas sigue siendo seductor. Pero comencemos con las definiciones, el Compute as a Service o CaaS (por las siglas en inglés) es un modelo de infraestructura que proporciona recursos de procesamiento bajo demanda.
De esta forma, el CaaS permite a las empresas simplificar y escalar sus necesidades informáticas trabajando mediante “workloads” o cargas de trabajo, abarcando desde las necesidades básicas de computación (terminales) hasta el Big Data y la seguridad informática.
Pero el CaaS permite a las empresas acceder a servicios de computación de alto desempeño (HPC) democratizando súper plataformas de cómputo antes restringidas a megacorporaciones o institutos de investigación. Existen varios jugadores en este mercado, así como confusiones, porque el CaaS también tiene otros significados.
Otros CaaS en el mercado
Desde hace un par de años el modelo de servicios ha crecido tanto que ya habla del XaaS o del todo como un servicio, que básicamente abarca cualquier servicio informático que se entrega a través de Internet y se paga en un modelo de consumo.
Por ello no es de extrañar que surjan otros significados para el CaaS donde el más conocido es el de contenedores como un servicio o Container as a Service. Recordemos que los contenedores son paquetes de elementos que permiten ejecutar una aplicación en cualquier sistema operativo.
De esta forma nace el CaaS como un modelo de la nube, basado en contenedores, que permite desplegar y escalar rápidamente aplicaciones en infraestructuras de la nube.
Y siguiendo con la explosión de términos también está el Commerce as a Service (CaaS) que trata de mover toda la computación y datos del comercio electrónico a la nube como una forma de reducir los costos operativos de las empresas al tiempo que tercerizan la infraestructura tecnológica.
Pero, y volviendo al tema original de nuestro artículo, lo más interesante del Compute as a Service es la capacidad de ofrecer capacidades de cómputo nunca vistas en segmentos del mercado de menor envergadura ofreciendo nuevas herramientas a los emprendedores sin importar donde se encuentren.