Cinco cosas que he aprendido de la campaña de Obama

Bueno. Ya pasó. Todo el mundo ha visto alguna imagen o ha recibido un tuit de la campaña de Barack Obama. No me extraña, ya que su mensaje «Cuatro años más», acompañado de una fotografía suya abrazando a su mujer Michelle Obama, es el más retuiteado de la historia (de momento, claro).

He analizado la campaña a vuelapluma y creo que las pymes pueden extraer por lo menos cinco lecciones para su estrategia empresarial:

 

  1. Apunta, afina y crea tu estrategia. Entre otras razones, Obama ha ganado por el apoyo de los hispanos, los jóvenes y las mujeres. Son tres grupos de interés diferentes a la mayoría tradicional de la sociedad norteamericana. Los candidatos, hasta 2008, apenas atendían sus demandas, pero Obama ha escuchado y puesto en valor sus necesidades. ¿Podría estar pasando esto mismo con nuestro negocio? En marketing, denominamos esta acción la búsqueda de nuevos océanos azules. Consiste en la creación de nuevos espacios o mercados donde no hay competencia. Es la empresa quien crea la demanda de un producto o servicio, por lo que tiene la capacidad de dirigir el crecimiento, innovar rápidamente y olvidarse de lo que hacen los demás. ¿Has pensado si tu pyme está compitiendo por las minucias de un mercado saturado cuando podría crear otros nuevos?
  2. Profesionaliza la gestión de la información. Existen numerosas bases de datos de clientes para realizar campañas de e-mail marketing, pero no se trata de eso. La campaña nos enseña que la gestión de la información puede ser una fuente de ventaja competitiva. Ben LaBolt, uno de los portavoces oficiales, ha llegado a asegurar que los big data son el equivalente a los «códigos nucleares», por su capacidad para transformar la estrategia de Obama. Aprovecha la ola de los big data para buscar nuevos nichos, mantener una relación continua con los clientes y proveedores, revisar la estrategia de distribución y comercialización y, sobre todo, innovar en la forma de relacionarte con ellos, ofrecer nuevos servicios y extraer conclusiones.
  3. Atiende a cada cliente, distribuidor o proveedor como si fuera el único que tienes. Los colaboradores de la campaña fueron los primeros en recibir un mensaje de agradecimiento por su ayuda. Claro que era un mensaje preparado, pero la sola atención previa al baño de masas demuestra que el presidente electo sabe dar las gracias y crear una relación especial. Estoy convencido de que las bases han agradecido ese minuto especial de dedicación antes que cualquier mención en el escenario. ¿Has personalizado tu relación con los clientes o bien mantienes un correo electrónico genérico con las ofertas que no le interesan? Si es así, tus mensajes no serán bien recibidos. Cambia de estrategia y crea mensajes únicos, de acuerdo con las preferencias, las tendencias de compra, las recomendaciones recibidas y otras variables similares.
  4. En redes sociales, el éxito de Obama no es casual. El magnífico análisis que publica Yorokobu revela cómo el equipo del presidente ha cuidado el estilo, el lenguaje y el storytelling, la calidad fotográfica, la dirección de arte o el uso de infografías. Mención especial merece Twitter, que ha sido uno de los ejes para reforzar el voto y el compromiso con la campaña. El 6 de noviembre mi timeline se llenó de mensajes del tipo «Haz RT si ya has votado por Obama» procedentes de mis amigos de Estados Unidos. La lección que extraigo es que en cada medio social hay que utilizar sus ventajas, su lenguaje y sus redes. No podemos emplear Facebook como una valla publicitaria ni Twitter como un canal unidireccional. Observa los pantallazos de campaña y aprovecha sus ideas para pensar las tuyas.
  5. Ilusiona y sé un líder. Obama ha demostrado que tiene la capacidad de ilusionar y liderar a buena parte del electorado. Más aún, es capaz de mantener la llama encendida en el equipo de voluntarios, posibles votantes y profesionales de la campaña cuando las encuestas ponían en duda su victoria. Por eso, les dedica tiempo y espacio, les cede protagonismo en fotografías y les pone en el corazón de la estrategia. ¿Has dedicado recientemente tiempo a tus empleados? Ellos son el motor de la pyme, por lo que estará muy bien que les animes y les cuides en todos los sentidos. Un momento de atención, un correo electrónico o una llamada de teléfono pueden ser más valiosos que cualquier otra acción suelta. Prueba y verás.

 

Foto @loop_oh, distribuida con licencia Creative Commons BY-2.0

Exit mobile version