Truekit: Cómo convertir en un negocio las tarjetas regalo que no se canjean

Tarjetas regalo de Truekit

“No solo en mi caso, también en mi entorno había gente con tarjetas regalo que no canjeaba, y pensé que ahí había una oportunidad para ayudar a los demás y a la vez iniciar un negocio”.

Como en tantas otras historias de emprendedores, la observación de la realidad llevó a Santiago Rodríguez-Losada a descubrir un nicho de mercado.

Truekit.com ofrece desde 2014 a los usuarios una plataforma para la compra, la venta y el intercambio de tarjetas regalo con descuentos que van del 2% al 50%.

Se trata de una iniciativa que incluye primeras marcas como El Corte Inglés, Ikea o Carrefour. Y solo por citar tres del enorme porfolio de esta empresa, que el pasado 2019 mereció el premio CEAJE al Mejor Joven Empresario Autónomo.

Truekit: olfato emprendedor

Es el reconocimiento al olfato emprendedor de Santiago Rodríguez-Losada y a su empeño para convertir en realidad su idea, que le llevó a investigar en Estados Unidos diversas soluciones “hasta entender el modelo de negocio, que adaptamos al mercado y la picaresca española”, comenta en alusión a la centenaria tradición nacional por saltarse la norma.

La picaresca fue el motivo por el que el negocio no empezó a tomar su forma definitiva hasta encontrar con la forma de verificar la autenticidad de las tarjetas regalo de todas las firmas comerciales.

“En ese momento, empezamos a desarrollar una web, que ya hemos perfeccionado en varias ocasiones, y luego una aplicación móvil con la que los usuarios pueden comprar y vender sus tarjetas regalo de forma cómoda y automatizada”.

Durante un año se probó el modelo en el entorno de confianza de la empresa, y ya en 2015 se sometió a la prueba de fuego del mercado: “Debíamos comprobar que había gente con tarjetas regalo que no quería, que estaba dispuesta a venderlas, y que podíamos atraer a nuestra plataforma”.

Para lograrlo, era imprescindible crear un entorno de confianza. En este empeño ha resultado muy exitosa su política de generación de contenidos, que promocionan con inversiones muy medidas en soportes publicitarios de Google, Facebook e Instagram.

Equivocarse pronto y barato

Durante este proceso de perfeccionamiento y adaptación, Rodríguez-Losada insiste en la importancia de dejar que el modelo pivote: “Quien diga que su negocio no ha dado bandazos, miente”, afirma sonriendo.

“Uno de los mejores consejos que puede oír el emprendedor es el de equivocarse pronto y barato. Y para conseguirlo, es imprescindible estar escuchando continuamente al mercado”, manifiesta.

Rodríguez-Losada –que este año cumplirá 40 años–, ya había cultivado esta habilidad con su experiencia como comercial y más tarde como empresario en el sector de las agencias de marketing digital. Fue así como el negocio encontró en las propias cadenas comerciales un nuevo e inesperado aliado: “Desde su punto de vista somos un canal de venta especializado que ofrece visibilidad, negocio y ventas”.

Desde el momento en que los retailers identificaron en Truekit una oportunidad de negocio, el proyecto pudo asegurar una de sus principales necesidades: la continuidad y regularidad en la oferta de las tarjetas regalo.

Esa ha sido una de las bases en el crecimiento de Truekit, que en 2019 multiplicó por 2,7 el volumen de negocio del año anterior: “Este 2020 esperamos hacerlo por tres”, explica.

Emprender acompañado

“Ya somos un producto rentable, y lo hemos logrado empleando solo recursos propios”. Sin embargo, Truekit aborda ahora un proceso de crecimiento e internacionalización, viaje para el que no descarta contar con aliados: “No es que esté buscando un socio, pero no me importaría tener a alguien con el que compartir opiniones”.

Emprender en solitario nunca es bueno”, afirma Rodríguez-Losada: “Es más fácil hacerlo acompañado, sobre todo si sabes rodearte de perfiles complementarios al tuyo que te aporten. Cuando estás solo te conviertes en un hombre orquesta, a menudo con demasiadas cosas en la cabeza”.

De momento, para este 2020, baraja hacer una ronda de financiación, aprovechando que la compañía después de seis años de trabajo está en el radar de varios inversores: “Hay que aprovechar esa visibilidad”, justifica.

Internacionalización y automatización

Dicha inyección de capital debería servir para el proceso de internacionalización de la compañía, que este año comenzará por Portugal y algún mercado hispanoamericano. Para acelerar esta expansión por América, Truekit ya ha buscado socios locales que impulsarán la compañía desde Miami.  

Pero el crecimiento debe ir acompañado de mejoras estructurales, sobre todo enfocadas a la automatización de procesos.

Truekit desarrolló un algoritmo que, explicado de forma sencilla, permite automatizar las labores de compra y venta de las tarjetas regalo. De este modo, en función de determinadas variables, entre ellas la demanda que la marca de la tarjeta tiene entre los usuarios de la plataforma, valora en segundos su precio, para que su propietario decida si la quiere vender en la plataforma o no o con un determinado descuento.

En segundo lugar, Truekit asumió el reto de buscar soluciones de integración en la estructura de muchas de las principales marcas con las que trabaja. Era una premisa importante para ofrecer inmediatez en el servicio manteniendo la seguridad.

Ahora estos y otros procesos deben ser capaces de perfeccionarse y automatizarse para favorecer su crecimiento internacional.

Otros operadores ya han olfateado este nicho de mercado, por lo que es importante acelerar la expansión, contando con la tecnología como la mejor aliada, “pero siempre haciendo bien las cosas. Estoy totalmente en contra de esas empresas que justifican en las prisas errores o descuidos en el servicio que ofrecen al cliente”.       

Exit mobile version