A las innumerables ventajas de la transformación digital de las empresas hay que sumar también las posibles amenazas que conlleva, como pueden ser las falsificaciones en Internet.
Durante el último año, con numerosos empleados en teletrabajo y con el boom del comercio electrónico, los ciberdelincuentes están viviendo su “época dorada”.
La diferencia entre el mundo físico y el digital es abismal. Mientras en el primero somos normalmente conscientes de que estamos comprando un producto falso, en el digital es más fácil la estafa. Máxime teniendo en cuenta las artimañas de los ciberdelincuentes para colocar sus falsificaciones, y no siempre a precio de saldo.
Un agujero superior a los 6.700 millones de euros anuales
No hablamos únicamente de perfumes sin aromas o de camisetas de fútbol con escudos falsos de pegatina.
El comercio y los fabricantes pierden en España el 10,6% del volumen total de sus ventas, debido a los productos falsificados. Contante y sonante, en nuestro país el agujero para las marcas supera los 6.700 millones de euros anuales. Asimismo, supone la destrucción de unos 53.500 puestos de trabajo, según un informe de la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO).
En la UE las pérdidas escalan hasta los 60.000 millones de euros y los cerca de 470.000 empleos. Y el futuro no resulta nada halagüeño, puesto que algunos estudios advierten de que este rastrillo camuflado en Internet podría hacer un roto de 991.000 millones de dólares el próximo año.
Claves para inmunizar a las marcas
Se trata de un coste económico sumamente elevado al que habría que añadir el daño reputacional que provoca.
La seguridad es una de las principales asignaturas pendientes para personas y empresas en esta nueva era. Y no solo en España, también en Estados Unidos y otros países de la UE.
En 2020 se dispararon las compras online y, por consiguiente, los ciberdelitos y los engaños. En este contexto, «ninguna compañía está preparada para monitorizar y eliminar usos indebidos de marca de una forma manual», asegura Javier Perea, CEO de Smart Protection, una compañía española que protege a las marcas contra falsificaciones en Internet.
De ahí que tanto las marcas como las propias plataformas y marketplaces necesiten tecnologías para acelerar la detección y eliminación de infracciones.
5 pasos para luchar contra las falsificaciones en Internet
- Monitorizar la red de manera sistemática 24 horas al día los 7 días de la semana.
- Desarrollar un sistema de análisis efectivo con Inteligencia Artificial.
- Tener en un equipo de Data Analysts especializado
- Contar con un sistema de enforcement eficaz.
- Cerrar acuerdos exclusivos con las principales plataformas y marketplaces.
En este sentido, Perea destaca que Smart Protection es uno de los pocos miembros de Google TCRP (Trusted Copyright Removal Program) que cuenta con las certificaciones necesarias en las redes sociales para desindexar y eliminar los enlaces que conducen a contenidos ilegales.
Pioneros en ciberseguridad
Pero, ¿cómo y cuándo surge la idea de crear la empresa? Su CEO relata que el germen fue un proyecto universitario de ingeniería impulsado por Javier Capilla y Manuel Moregal.
Poco después de su nacimiento, fue participada por Wayra España. De esta manera, no tardó en conectar con el ecosistema de Venture Capital y en comenzar a colaborar con el Grupo Telefónica.
En este punto, se incorporó Javier Perea como tercer fundador, un pionero en ciberseguridad que en 1990 creó una de las primeras empresas de antivirus en el mundo y la primera compañía de ciberseguridad española.
Respaldo de Telefónica
“El ecosistema con Telefónica (Telefónica Tech Ventures, ElevenPaths y Wayra) ha sido clave para el desarrollo de Smart Protection de start-up hasta scale-up”, manifiesta Perea.
La alianza se materializa de tres maneras:
- Un Sell-to, ya que protegen los contenidos exclusivos y las producciones propias en Movistar+.
- Un Sell-with con clientes conjuntos en España y Latinoamérica.
- Un Sell-through, en el cual Telefónica actúa de distribuidor e integra el producto en su amplio porfolio de servicios.
Rondas de inversión
Tras ser participada por Wayra, en junio de 2017 se hizo una primera ronda de inversión semilla, en la que se incorporaron JME Ventures, Bankinter y BigSur Ventures.
El crecimiento que se logró gracias a esta inyección de capital se vio acelerado en agosto de 2019, cuando se celebró una ronda de inversión Series A liderada por Nauta Capital y acompañada por los inversores existentes.
Ya en octubre de 2020, Smart Protection cerró una ronda de 10 millones de euros coliderada por Knight Capital, Swanlaab Venture Factory, el CDTi y Telefónica Tech Ventures, el nuevo vehículo inversor de Telefónica; a la que el resto de inversores existentes también se sumó.
La inversión recibida en todas las rondas alcanza los 20 millones de euros, lo que ha permitido a la empresa constituir un equipo de ingeniería top y seguir incorporando al mejor talento mundial, para desarrollar su plataforma tecnológica con los últimos avances en inteligencia artificial.
Principales cifras
El combate que libra Smart Protection no solo ha noqueado a piratas y falsificadores en Internet, sino que se traduce en cifras: cada año multiplica por dos y tres su facturación.
En tres años ha pasado de 10 a más de 120 empleados de más de 25 nacionalidades. Y tiene presencia internacional con clientes en 27 países, de los cuales el 75% residen en el extranjero.