Salvar al mundo de una catástrofe natural es su reto, y conocer sus competencias para el desempeño de un puesto de trabajo, el objetivo. Nawaiam irrumpe en el mercado con un videojuego de selección de talento, que en tan solo 15 minutos define el perfil conductual de las personas. Una startup que ya ha conquistado a empresas como Coca-Cola, McDonald’s o Twitch en 15 países y sueña con convertirse en el próximo unicornio.
“Si el mundo cambia, las herramientas de evaluación de talento deben cambiar con él. Complementamos o reemplazamos los modelos tradicionales con un soporte muy adecuado a las nuevas generaciones, capaz de evaluar el talento del presente y del futuro”, explica el argentino Javier Krawicki, cofundador de Nawaiam junto al también experto en recursos humanos, Horacio Llovet.
Fruto de la evolución natural de su proyecto inicial, TuPrimerCurro (una plataforma que desde 2014 ofrece herramientas para la inserción laboral juvenil en países como Argentina, Chile y España), lanzan su nueva propuesta en diciembre de 2019.
Una herramienta de selección de personal
Nawaiam nace pensando en las necesidades de las organizaciones que seleccionan personal. A ellas les ofrece ciencia de datos y una experiencia de gamificación para sus procesos de evaluación. Un modelo que además aporta ese barniz de innovación a la marca de empresa empleadora, que tanto gusta para captar y fidelizar al talento más joven.
Para reforzar esa imagen de buen hacer empleador, a todos los candidatos se les ofrece un resumen con la información del análisis realizado por Nawaiam. Resultado con el que, según defiende Krawicki, “se identifica hasta el 89% de los usuarios”.
Jugando se evalúa mejor
“Cuando juegas, eres tú mismo”, asegura Krawicki. “Nawaiam permite evaluar al candidato, proponiendo durante unos 15 minutos una experiencia más relajada, que contrasta con el estrés que generan los procesos de selección habituales. Mientras el candidato está intentando salvar el mundo, libera de un modo inconsciente y genuino esa información que va a ayudar al evaluador a tomar la decisión correcta”.
En tiempo real, esa información pasa al dashboard de Nawaiam, ofreciendo los resultados de su análisis de las competencias blandas (soft skills). “Las nuevas hard skills del puesto de trabajo”, bromea Krawicki, para significar su importancia crucial en cualquier proceso de selección, donde estas habilidades pueden marcar la diferencia entre un candidato bien preparado y el idóneo para desempeñar con éxito la responsabilidad de esa posición.
De este modo, Nawaiam también se ofrece como herramienta de mapeo de talento entre los empleados de una empresa. Las compañías que analizan las competencias de la plantilla disponen de una información que, por ejemplo, puede generar rankings de idoneidad para un puesto de nueva creación, para el que se han definido con detalle las competencias esenciales para su desempeño. Por ejemplo, ‘clara orientación a objetivos con habilidad en liderazgo y comunicación’ para los responsables de tienda de una nueva red de puntos de venta.
Nawaiam también elabora planes de formación
Otra utilidad es la elaboración de las rutas formativas de determinados empleados que van a promocionar. En este caso, Nawaian sirve para identificar uno a uno qué habilidades se deben reforzar para capacitarlos para el nuevo puesto.
“Permitimos trabajar mucho más rápido con la información, lo que también ofrece un interesante ROI a la empresa”. En Nawaiam calculan que el retorno sobre la inversión es del 50% en ahorro del tiempo empleado en entrevistas, o del 30% en los costes operativos de los procesos de Recursos Humanos.
Estos ratios incluso pueden mejorar, dada la escalabilidad que permite, ya que la herramienta puede evaluar simultáneamente a miles de personas, “por eso también nos están utilizando mucho en el sector educativo para la orientación laboral del alumnado”.
Guerra del talento en el metaverso
“Evaluar a un candidato con un videojuego es una propuesta disruptiva pero muy atractiva para una mayoría de empresas”. Con estas palabras, Krawicki explica el rápido éxito de este producto lanzado simultáneamente en Argentina y España, pero con clara vocación global, aprovechando esa “guerra por el talento” que disputan las grandes corporaciones en todo el mundo.
Con clientes en 15 países de sus tres versiones iniciales en español, portugués e inglés, la empresa espera multiplicar por diez sus ventas este 2022, para terminar el año con una facturación de unos 4,5 millones de euros.
Pero el reto es seguir fraguando esa cultura de empresa que posibilite un rápido crecimiento. Y para ello, sobre todo, se confía en la capacidad de innovación del equipo de 40 personas en plantilla, al que se suman unos 35 profesionales de otras compañías del grupo.
Desde su centro de innovación ubicado en Madrid, se trabaja en la adaptación de Nawaiam al metaverso, que debería presentarse antes de fin de año. “Queremos ofrecer una experiencia de evaluación más inmersiva y potente, pero también incluye mejoras en el algoritmo para llegar a una confiabilidad del sistema del 95%, mejorando en seis puntos el número de usuarios que en la actualidad se identifica con los resultados”.
Expansión internacional
Además de las novedades del producto, se trabaja para abrir operaciones en la India este mismo año y en México y Brasil para 2023. En buena sintonía con la ambición de los fundadores, el plan de expansión es exigente. “De aquí a tres o cinco años, tenemos el sueño de convertir Nawaiam en un unicornio (que su valoración alcance los 1.000 millones de dólares), y para ello debemos lograr que nuestra herramienta sea la más eficiente en la evaluación del talento presente y futuro”.
Sueños que Krawicki asegura estar dispuesto a defender junto a su socio y equipo. Un emprendedor que asegura aprender más de los errores que de los aciertos: “Creo que del jefe que más aprendí fue del peor que tuve, él me marcó el camino por el que nunca debía transitar cuando dirigiera mi propio equipo”, recuerda.
Y es que Krawicki defiende que el mundo es de los valientes. “Debes saber que no es lo mismo tener una buena idea de negocio que saber llevarla a cabo. Pero si crees que tienes un producto y capacidad para sacarlo adelante, es mucho mejor acostarte todas las noches sabiendo que lo has intentado que pensando qué hubiera sucedido si lo hubieras hecho”.