Emprender en femenino no es habitual. Así lo demuestran los datos del informe Mapa del Emprendimiento 2018, elaborado por quinto año por la Startup Competition de South Summit Madrid 2018, que revela cómo las startups lideradas por mujeres únicamente representan el 22% y se centran especialmente en el ámbito educativo.
Un porcentaje que, aunque bajo, crece respecto al informe de 2017 en 4 puntos, una tendencia en línea con las compañías europeas (23 % de fundadoras) y latinoamericanas (24 %).
Pero además el informe señala que las mujeres que emprenden obtienen mejores resultados y tienen menor índice de fracaso (22% frente al 51% de proyectos que tienen a hombres al frente).
Sin embargo y pese al paso firme de la mujer en este ámbito, un año más el perfil del emprendedor que dibuja South Summit Madrid es el de un hombre, de 35 años de media, con formación universitaria (93%) y una sólida trayectoria profesional.
Además, el retrato indica que el emprendedor español es recurrente, en concreto, un 46% ha creado ya más de una startup, algo que también hace que las posibilidades de éxito aumenten. Y es que, según el estudio, la tendencia al fracaso de una startup disminuye con el número de proyectos lanzados por un mismo fundador (baja al 15% con tres fundaciones y al 2% con cinco o más proyectos lanzados).
“La figura del emprendedor en serie es muy interesante y necesaria, porque es alguien que sabe identificar una necesidad, luego ya pasará el testigo a quien sepa desarrollar”, explica María Benjumea, fundadora de South Summit Madrid.
Emprender por oportunidad y acompañados
Muchas veces es fácil pensar que la mayoría de las personas que monta una empresa lo hace porque no tiene otra opción laboral, una suposición que es errónea, ya que -según el Mapa del Emprendimiento 2018- sólo uno de cada diez emprendedores estaba antes en situación de desempleo, lo que demuestra la constante de los últimos años de emprender por oportunidad y no como necesidad para obtener un trabajo.
De hecho, entre los motivos que apuntan los emprendedores para la creación de una startup, 6 de cada 10 reconocen que siempre quisieron emprender y un 23% se unió a un proyecto en el que creía.
Pero además, a la hora de poner en marcha su proyecto, los emprendedores en serie lo tienen claro: mejor acompañados. Sólo un 18% de las startups tiene detrás a un único fundador. Un 35% cuenta con dos fundadores y un 29% ha sido creado por tres emprendedores.
La startup española se ha dado cuenta de que su «media naranja» es la corporación y, de hecho, de acuerdo con el informe de South Summit Madrid, el 80% de los emprendedores tiene entre sus objetivos prioritarios cerrar acuerdos de negocio con una corporación, el mismo porcentaje que persigue generar visibilidad para su startup, mientras que un 72% busca lograr inversión para el proyecto.
Las startups se hacen mayores
En 2017, según la Asociación Española de Startups (AES), se contabilizaron en España 3.258 empresas emergentes o de nueva creación, un 20% más respecto a 2016, que recaudaron en su conjunto un total de 779 millones de euros.
Un mapa del emprendimiento con cuatro puntos destacados de la geografía española: Madrid y Barcelona, los más consolidados, frente a Valencia y País Vasco, los emergentes.
Se trata de empresas que, afortunadamente, comienzan a cumplir años. Según el Mapa del Emprendimiento 2018, las startups españolas se han hecho mayores: un 66% sobrevive al primer año y, de media, los emprendedores ya han soplado las velas de los 2,3 años de edad de sus proyectos, superando la cifra de 2017, que se situaba en 1,87.
Estos datos vienen acompañados de una consolidación en términos de negocio. En este sentido, más de un 25 % de los emprendedores españoles encuestados superaron en 2017 los 50.000 euros de facturación anual, umbral al que espera llegar este año más de la mitad de los participantes en el estudio. Actualmente, un 17% de las startups de nuestro país cuenta con un EBITDA positivo, frente al 14% que lo registraban en 2017.
Algo que viene acompañado de la creación de empleo que protagonizan las startups, con una media de siete profesionales en su plantilla, frente a los seis integrantes observados en el informe del año pasado. Asimismo, a corto plazo, un 83% de proyectos está buscando nuevos miembros.
El nivel de desarrollo de los proyectos españoles va creciendo paulatinamente, según este informe. Y, aunque la mayoría se encuentra en fase seed (33%) y early (39%), un 20% de las startups españolas ya han alcanzado la fase de desarrollo growth, con niveles similares al ecosistema europeo y latinoamericano.
¿Y a qué se dedican estas startups? La mayoría de las empresas emergentes españolas se dirigen al público empresarial (un 38% se dedica al B2B o business to business y un 26% lo combina con los servicios al consumidor).
En general, son empresas que en un 38% se dedican a elaborar aplicaciones informáticas o empresariales (14%), el 21% ofrecen servicios y solo el 11% se dedica a productos físicos.
Gráficos del artículo: Mapa del Emprendimiento 2018