Las redes sociales siguen incrementando su protagonismo. Cada vez son más las empresas que tienen presencia en ellas y que las utilizan para fortalecer su marca, atender incidencias o simplemente para conversar y crear vínculos emocionales más fuertes que con los medios tradicionales.
Este año hemos visto un mayor despegue de Linkedin, que cada vez se utiliza más para compartir contenidos, y no sólo como un repositorio de curriculum vitae o como plataforma de networking. Google Plus continúa estancada, pese a los esfuerzos del gigante de Internet por sacarla adelante. Facebook se va haciendo poco a poco con más nicho de mercado; las páginas profesionales (y Facebook Ads) y la inclusión de vídeos incrustados en la propia plataforma han sido sus principales motores este año.
Youtube continúa creciendo, aunque menos y con más competidores (Facebook, Vine); los vídeos son el soporte preferido por los más jóvenes, y las empresas -viendo su potencial- los utilizan cada vez más en sus acciones de marketing y publicidad. Twitter busca fórmulas de financiación y trata de hacerse un hueco en el mercado de los anuncios patrocinados; sigue creciendo, pero a menor ritmo que en años anteriores. Y, por último, el reinado de las imágenes ha dado mayor protagonismo a redes como Instagram y Pinterest.
Estas son algunas de las novedades de este año:
- Nuevas herramientas para gestionar las páginas profesionales.
- Emoticonos e insignias.
- Información a la carta y seguridad.
- Vídeos secretos y videoteca en las páginas profesionales.
- Mayor protagonismo de la publicidad en Twitter.
- Twitter Ads para móviles.
Los vídeos
- Youtube en el entorno empresarial.
- Aunque no es una red social, sino una aplicación, Periscope está «pegando fuerte» como herramienta para retransmitir vídeo en tiempo real desde el móvil, y ha dejado atrás a su principal competidor: Meerkat.
Las imágenes
- El potencial de una cuenta en Pinterest en el entorno profesional.
Lo que nos espera
Está claro que tenemos redes sociales para rato. Aunque muchos llevan augurando su fin, su decadencia o la caída constante de usuarios, lo cierto es que -si nos atenemos a los datos y miramos a nuestro alrededor- las redes sociales tienen cada vez más peso en diferentes ámbitos:
- Los procesos de selección en las empresas son un ejemplo, con datos muy significativos: el 70% de los jefes de RR.HH. las utilizan para reclutar personal.
- Atención al cliente y fidelización: como argumenta José Facchin, «una asistencia personalizada en redes sociales es una parte esencial de un servicio de atención al cliente más proactivo, moderno y social”. Las insignias de Facebook son un claro exponente de la relevancia que está tomando la atención en medios sociales: se valora el porcentaje de respuesta y el tiempo medio que tarda una empresa en responder a los usuarios.
- Reputación online: los comentarios de los usuarios en las redes sociales sobre los productos y servicios de una empresa inciden directamente en su imagen de marca, mucho más que los contenidos corporativos difundidos por las propias empresas.
- Ventas: un 70% de los usuarios admite la influencia del social media en el proceso de compra, aunque realmente sólo un 12% ha comprado a través de una red social, según se desprende del VI Estudio de Redes Sociales de IAB Spain. En 2016 proliferarán los botones con llamadas a la acción («Compra ahora», «Consíguelo ya»), para que el usuario pueda comprar directamente desde las redes sociales.
Foto: Esther Vargas