Hace ya década y media que la empresa RIM (Research in Motion) lanzó al mercado su primer dispositivo de correo electrónico del conocido sistema BlackBerry, y poco a poco se fue generalizando su uso en el mercado. Le siguieron otros fabricantes con sistemas como Windows Mobile y Symbian. Pero no fue hasta el año 2007, cuando Apple lanzó el primer iPhone, que, junto con su competidor directo, Android (lanzado en 2008) revolucionaron para siempre la forma de trabajar de las pymes.
Hoy en día, el entorno de trabajo de las pequeñas empresas ha cambiado enormemente frente al que existía hace unos quince o veinte años. Las oficinas se han abierto, los trabajadores salen cada vez más a la calle, se conectan desde cualquier punto a su trabajo o a Internet, y las empresas utilizan una amplia variedad de dispositivos, que por aquel entonces, eran más bien ciencia ficción.
En general, el smartphone o la tablet se han situado en el centro de nuestro día a día y se han convertido en una herramienta de gran utilidad para comunicarnos con nuestros clientes. Queremos la última tecnología, redes 4G, comunicación por wifi y bluetooth, pantallas y cámaras de última generación, sistemas de posicionamiento GPS, etc. Pero nos preocupamos bastante poco de lo que almacenamos dentro de estos aparatos.
Nos compramos un dispositivo valorado en cientos de euros, con capacidades espectaculares, pero sin darnos cuenta de los posibles handicaps que puede tener, hasta que un día recibimos un cargo realizado supuestamente con nuestra tarjeta de crédito, con la que habitualmente utilizamos para comprar desde el móvil. No nos hemos dado cuenta, pero nuestro terminal está infectado con un troyano. Pero además, en estos dispositivos móviles, tenemos un riesgo añadido: el robo o la pérdida.
¿Cuántos de nosotros accedemos al contenido de nuestras cuentas de correo de la empresa a través de una única pulsación en la pantalla? ¿Cuántos almacenamos documentos, adjuntos e información confidencial de la empresa en smartphones y tablets? Por no mencionar la información personal que normalmente tenemos en estos dispositivos, como fotos, vídeos o contenidos de redes sociales.
El paradigma ha cambiado. Ya no solo trabajamos con ordenadores o Macs. Utilizamos a diario tambiénteléfonos inteligentes y tablets, pero todavía no somos conscientes de la necesidad de protegerlos.
Mientras tanto, el malware (software malicioso), no sólo para ordenadores, sigue creciendo a un ritmo alarmante. Pensemos, por ejemplo, en el sistema operativo más vendido en el último año, Android. Una parte importante de usuarios todavía utiliza versiones de Android antiguas con fallos de seguridad conocidos. Fallos que son explotados hábilmente por hackers que, bien mediante técnicas de ingeniería social, phishing, bien mediante la inyección de troyanos a través de ataques dirigidos, consiguen hacerse con información privada de los usuarios. Las estadísticas muestran que el problema de la pérdida o robo de móviles o tabletas es tremendamente frecuente. Y esto significa dejar nuestros documentos, anexos e información confidencial en manos poco recomendables.
Sólo con una solución potente, que proteja de forma integral todo tipo de dispositivos, una pyme podrá estar tranquila y confiar en la seguridad e integridad de la información.
McAfee Multi Access combina varios productos en uno solo, permitiendo gestionar la seguridad de todo tipo de dispositivo de usuario, ya sea PC, Mac, smartphone o tablet, desde un único punto centralizado. De esta forma, seremos conscientes de un solo vistazo, de cuál es el grado de protección o exposición de los terminales, así como de aquellos dispositivos cuya protección no está actualizada.
La seguridad es distinta, en función del tipo de dispositivo que se desea proteger, pero en todos los casos proporciona el mayor nivel necesario para poder conectar nuestros dispositivos a Internet sin preocupaciones.
La interfaz del servicio es tremendamente sencilla, y permite agregar nuevos dispositivos para proteger con muy pocos clics y de forma intuitiva:
Si quieres profundizar más en el tema, no te pierdas este vídeo:
Grabación y edición del vídeo: Carmen Gavara.
Foto: IntelFreePress