Llegó el momento en que la generación Z, también conocidos como centennials, llegue a los puestos de trabajo. Son el futuro, pero como todos los grupos tienen sus particularidades.
Nacidos entre 1995 y 2005 la generación Z es la primera verdaderamente digital, sucesores de los Milennials, son una generación ecológica que busca un balance entre la vida laboral y sus propios sueños.
Y esto es importante porque la generación Z está llegando a las oficinas convirtiéndose en la principal fuerza laboral y productiva del planeta. De hecho, ya representan el 32% de la población.
¿Cómo atraer ese talento humano?
Cientos de estudios se han centrado en el comportamiento de los centennials, algunos con diversos hallazgos, pero también con elementos en común como:
- Son autodidactas
- Saben aprovechar y desarrollar la tecnología
- Se interesan por el medio ambiente
- Les gusta construir relaciones
Una encuesta realizada por Adecco encontró, además, que 6 de cada 10 desea trabajar en una empresa que priorice la igualdad de género, la alimentación saludable y la protección animal.
También se cree que su capacidad para liderazgo es inmensa ya que ellos mismos piensan que las relaciones interpersonales pueden ser más beneficiosas que los conocimientos técnicos.
Pero si existe una clave para atraer a este grupo humano, es la flexibilidad que no solo se representa en espacios de coworking, también en espacios silenciosos, en privacidad ocasional y en relaciones cara a cara.
Otra de las formas de atraer este talento es ofreciendo programas de capacitación robustos con enfoques en la diversidad y con programas rápidos en múltiples disciplinas.
Pero no todo es fácil, incluso para generaciones tan preparadas como los centennials, se ha encontrado que requieren apoyo en áreas como resiliencia, tiende a desanimarse fácil, y a cuestionar órdenes que no entiendan.
Pero su rápida capacidad de aprendizaje y su cercanía con la tecnología los pueden volver la generación ideal para el manejo del Big Data y los retos de la inteligencia artificial.
Por último, un punto a considerar: todavía no se ha estudiado el verdadero impacto de la pandemia en la generación Z, la primera que verdaderamente está combatiendo este tipo de amenazas. Pero seguramente los volverá más fuertes.