¿Vender lo que sé fabricar o fabricar lo que sé que puedo vender?
En el anterior artículo sobre investigación de mercados planteaba la importancia de adoptar la óptica de mercado y superar la óptica de producto que predomina inconscientemente en el actual entramado empresarial. Es decir, que debemos partir de las necesidades del mercado en lugar de nuestra tendencia a convertir el producto en el centro de la estrategia.
Para ello es necesario realizar un esfuerzo por comprender las necesidades, motivaciones, comportamiento y expectativas de los consumidores. Y para aproximarnos a conocer estas cuestiones debemos echar mano de algunas herramientas y metodologías de investigación de mercados.
Comportamiento y opinión
La primera cuestión importante es comprender la diferencia entre cómo se comporta un consumidor y cómo dice que se comporta. La investigación de mercados no ha venido a descubrir nada que el saber popular no supiera ya: que ambas cosas son distintas, como reza el dicho popular “haced lo que yo diga, pero no hagáis lo que yo haga”.
Pero, en realidad, comportamiento y opinión son cuestiones complementarias, ya que la una nos ayudará a comprender mejor los por qué del otro.
En este artículo nos ocuparemos del comportamiento y más concretamente de aquellas herramientas online que nos pueden ayudar a averiguar los intereses del mercado, basándonos en lo que los internautas están buscando en Internet.
Google como herramienta de investigación
La mayoría de usuarios de Internet sólo están familiarizados con la función básica de Google como motor de búsqueda en la red. Sin embargo, debajo de lo que una vez fue sólo un buen buscador, hoy en día se esconde toda una familia verdaderamente grande de aplicaciones con diversas utilidades, algunas de las cuales pueden sernos muy útiles para investigar.
En este artículo propongo dos bastante similares en sus funcionalidades, de modo que para propósitos de investigación pueden ser utilizadas indistintamente:
Estas herramientas nos permiten aproximarnos al comportamiento de los usuarios de Internet y averiguar qué es lo que están buscando en Internet. Por lo tanto, estamos hablando de investigación comportamental pura, es decir, sabremos qué están buscando, aunque no sabremos las motivaciones, el porqué. Aún así, saber aquello que la gente está buscando en Internet nos revela una información de gran valor, sobre todo si estas herramientas además nos permiten saber:
- Cuándo lo están buscando, lo cual nos permite descubrir patrones estacionales de sus intereses.
- Desde dónde, lo que nos permite saber a nivel geográfico dónde están ubicadas las personas que tienen ese interés o necesidad.
Ejemplos de aplicación para pymes
Saber quién está buscando qué, cuándo y desde dónde puede ser algo tremendamente útil para determinados modelos de negocio. Por ejemplo, los establecimientos de servicios, ya sean academias de idiomas, agencias de viajes o también cualquier cosa susceptible de ser objeto de regalo pueden realizar una sencilla búsqueda en Google Trends o en Google Insights con las palabras clave de su negocio. Por ejemplo, pueden descubrir quién está buscando “idiomas”, “viajes” o ”regalos”, en qué momento del año se buscan esos conceptos y desde qué ciudades. En la siguiente imagen de Google Insights podemos ver que “idiomas” y “regalos” son dos temáticas que tienen una estacionalidad muy concreta en la provincia de Barcelona.
Este tipo de información nos puede ayudar a adelantarnos a la necesidad del mercado y a planificar nuestras propias acciones de comunicación y marketing, conociendo la estacionalidad de la demanda y su ubicación.
Someto a la imaginación del lector que encuentre de qué modo esta sencillísima herramienta de investigación comportamental puede ayudarle en su quehacer profesional. No me extrañaría nada que a mitad del artículo ya estuviera teniendo ideas para usarla en beneficio de su empresa.
En próximos artículos seguiremos desgranando el modo en que Google puede sernos de gran utilidad para conseguir información del mercado para nuestra toma de decisiones empresariales.
Foto @betsyweber, distribuida con licencia Creative Commons BY-2.0