Cada día buscamos mejor conectividad. Y esta mejora pasa por agilizar los procesos. Por ejemplo, el tiempo que transcurre desde que envías un paquete de archivos hasta el momento en que llega a su destinatario. Ese tiempo es conocido como tiempo de latencia de extremo a extremo o sencillamente latencia.
La latencia, por ser una unidad de tiempo, se mide en milisegundos o microsegundos.
Qué factores influyen
Existen varios factores que pueden hacer que la latencia de tu conectividad a Internet sea mayor o menos. Uno de ellos es la tecnología de acceso de red que uses en dicha conexión: fibra, ADSL y, desde el años pasado, 5G.
Del mismo modo, influye la distancia entre el punto que envía y el que recibe la información o los saltos que esos datos tengan que sortear en el camino. También la capacidad que tenga tu dispositivo sea tu ordenador, tablet, smartphone, etc.
Ventajas del 5G: latencia muy reducida
La red 5G ya es una realidad. Esta tecnología móvil permite reducir la latencia de forma increíble. Imagina que todos los electrodomésticos en tu hogar estarán conectados con tu teléfono y entre ellos.
¿Qué permitirá la red 5G? Podrás navegar hasta a 10 Gbps. Esta velocidad es tan sorprendente que descargarás una película completa en cuestión de segundos. Y lo mejor: la latencia será de solo 5 milisegundos e incluso inferior en el futuro.
Con la red 5G podremos tener conectados robots industriales, mobiliario urbano o electrodomésticos, y compartir información en tiempo real.
La latencia en el ADSL y la fibra
En los últimos años se ha mejorado mucho la latencia, sobre todo con la introducción de la fibra. En el ADSL en España se lograron 60 milisegundos de latencia, un tiempo bastante reducido comparado con los 330 que se encuentran en algunos países de Asia.
Con la fibra se ha logrado mejorar la latencia enormemente en España, con valores que pueden llegar a estar por debajo de 1 milisegundo y con la ventaja adicional de que se pueden alcanzar grandes anchos de banda, más de 100 veces superior en la actualidad que los de ADSL
El Edge Computing reducirá la latencia en las redes de siguiente generación
Lo que denominamos Edge Computing (aquí explicamos qué es el Edge Computing de manera sencilla) es lo que promete revolucionar la latencia. La idea es dar respuestas casi en tiempo real. Será muy útil para la Internet de las cosas (IoT), pues ya los datos recolectados no tendrán que viajar largas distancias hasta llegar a un centro de procesamiento de datos.
La idea es que Edge Computing realizará el procesamiento de datos lo más cerca posible del usuario o de la fuente que los produjo. Si vas en tu coche eléctrico conectado por 5G, por ejemplo, necesitas que esa conexión otorgue respuestas en tiempo real.
El Edge Computing hará esto posible. Y será igual con los dispositivos en las empresas (especialmente en la industria) o en casa.
Beneficios del Edge Computing
- Mayor velocidad en los dispositivos IoT.
- Capacidad de gestionar grandes volúmenes de datos y almacenarlos cerca del usuario final.
- Procesamiento de la información en tiempo real.
- Habrá más seguridad en muchos de los casos y garantías de residencia de los datos
Optimizar y reducir costes, además de tender hacia una mayor eficiencia, es la premisa de las nuevas tecnologías. La reducción del periodo de latencia apunta a generar beneficios en todos los campos.
Foto principal: Tony Stoddard