Desde siempre, marketing es igual a cliente. Hoy, con el móvil incrustado en nuestras vidas, cliente es igual a móvil.
El marketing móvil «pita», como debe ser. Pero parece que algunos han abrazado, sin pensarlo mucho, lo que creían que era un rápido camino para llegar más lejos. Un canal directo al bolsillo del cliente es una fruta golosa, que algunos utilizan pronto y mal, matando así a la gallina de los huevos de oro. Lo de ser prosumers está empezando a sabernos a poco y, como consumidores, empezamos también a dictar cómo y cuándo queremos ser abordados. Cada vez somos menos tolerantes con las marcas que “van por libre” sin tenernos en cuenta.
Para que cualquier estrategia de marketing funcione, debemos garantizar que el cliente, y no el producto ni la marca, son el centro de atención. Buena idea es apoyarse en las nuevas tecnologías, pero empieza a haber sombras. ¡Tenlas en cuenta y quédate al sol!
Pasa del big data al intelligent data
Que recibas en el móvil una oferta con el menú de un restaurante cercano justo cuando empiezas a oír ruiditos en tu estómago parece una buena idea… Y lo es, pero cuidado con abusar.
No gusta la oferta que se convierte en una interrupción irrelevante (no, yo no quiero ir a almorzar, acabo de comer y además lo he hecho en casa, vivo en esta zona). La ubicación por sí sola no implica casi nada. Pero es un diamante en bruto cuando se combina con información de clima, noticias, eventos, tráfico… y con datos personales y de transacciones del cliente. Sólo “cocinando” podrás proporcionar a tu cliente una experiencia de verdadera relevancia.
Te aborrecerán si no procesas nada y usas aisladamente cada dato que tienes. Busca el valor.
Sé coherente
El móvil es sólo un punto de encuentro más. No permitas que tus clientes tengan experiencias incoherentes. Si eres capaz de enviarles una comunicación personalizada a su móvil, asegúrate de que también eres capaz de reconocer sus preferencias cuando entren en tu tienda.
Saca partido de tus experiencias pasadas y valora su lealtad. Una visión 360 es vital para que el cliente se sienta realmente reconocido y tratado de manera individualizada.
Integra. Haz que se sienta reconocido y único en todas sus interacciones.
Respeta
Busca el momento y nunca bombardees. Lo bueno, si breve…
¿Te gusta recibir mensajes a todas horas o que te despierten de la siesta? Sé muy selectivo. Piensa mucho lo que envías y cuándo lo envías. Valora solicitar a tus clientes sus preferencias al respecto. Respeta su privacidad. No te apuntes a esta macrotendencia de recopilar datos sin poner los frenos y contrapesos adecuados. Hay información que no es adecuado usar. Ponte límites, dirá mucho de tu marca.
Y también sus deseos. Si ya te han dicho basta, que no te lo tengan que repetir. No hagas oídos sordos.
No te quedes cómodamente instalado en el statu quo. Di sí al marketing móvil y crea conexiones poderosas con tus clientes. Pero recuerda que no valen los atajos y que “para ganar, forzoso es trabajar”.
Foto: Johan Larsson