“Tienes que compartir en Google +, porque es la red social de Google y te posicionará mejor en Internet”. ¿Quién no ha oído esta frase?
Del mismo modo que en otras redes sociales -como Facebook, Twitter o Linkedin- el consejo es “tienes que estar”, en Google Plus la consigna es “compartir”. ¿Por qué? Porque muchos estamos ya de forma forzosa, simplemente por tener una cuenta de correo en Gmail o por disponer de un teléfono con sistema operativo Android. Así es. Google está luchando con uñas y dientes por incrementar al máximo el número de usuarios en su red social, y para ello utiliza todos los medios que tiene a su alcance.
De los aproximadamente 500 millones de usuarios registrados en Google+, un elevado porcentaje ni siquiera es consciente de tener perfil en dicha red social, y otros muchos no le encuentran ninguna utilidad diferente a la que proporcionan otras redes sociales. Pero sí que la hay: la mejora del posicionamiento natural en buscadores (SEO), sobre todo desde el lanzamiento, el pasado mes de septiembre, de su nuevo algoritmo de búsquedas, Hummingbird.
El motivo para lanzarlo fue que el anterior se había quedado obsoleto, porque cada vez se realizan búsquedas más complejas, que ya no solo se basan en palabras clave (keywords), sino en frases completas, y que además se hacen desde más dispositivos: smartphones, tablets, con lo que las búsquedas también pueden ser dictadas por el usuario, en lugar de tecleadas.
Ahora Google es capaz de entender cadenas de búsqueda complejas (long-tail) y responder a preguntas del tipo: ¿cómo puedo llegar a la plaza Mayor?, ¿qué tiempo hace?, ¿cuántos años tiene Harrison Ford?, etc. Ya no nos remite a la Wikipedia, sino que nos proporciona la respuesta a nuestra pregunta; entiende los qué, cómo, por qué, cuándo, cuánto…
El nuevo algoritmo también tiene en cuenta en sus mecanismos de búsqueda todas las opiniones y comentarios que se vierten en la Red, fundamentalmente a través de las redes sociales y los blogs, por lo que las conversaciones “relevantes” de las marcas y de personajes influyentes (influencers) tienen más peso que antes a la hora de situar un determinado contenido entre los primeros puestos de búsqueda orgánica (gratuita).
No olvidemos también que Google es el buscador más utilizado en el mundo, tanto en ordenadores de sobremesa, como en dispositivos móviles (más de un 80% de todas las búsquedas se realizan desde dicho buscador, seguido a gran distancia por Yahoo y Bing), y eso también inclina la balanza hacia contenidos que se compartan en su red social.
Se desconocen las decenas de variables que ha utilizado Google para configurar Hummingbird (porque no las ha desvelado), pero sí se habla con frecuencia de algunos factores que influyen a la hora de conseguir un buen posicionamiento:
El soporte
- Que la página web se adapte al formato de otros dispositivos: teléfonos inteligentes, tablets… Es lo que se denomina responsive web design o diseño web adaptable.
- Que la página cargue rápidamente los contenidos. Además del ancho de banda disponible (cuanto más, mejor), hay otros factores que influyen en la carga, como el excesivo tamaño de las imágenes, los vídeos en alta calidad, la utilización de determinados programas como Flash, etc., que hacen que se ralentice.
El contenido
- Que sea original y de interés para los usuarios.
- Que esté bien escrito -sin faltas de ortografía- y estructurado.
- Que se actualice periódicamente. De nada sirve publicar tres posts un día y luego estar dos semanas sin escribir nada.
- Que los usuarios permanezcan durante un tiempo en la web, ya sea leyendo un contenido determinado o navegando por las diversas páginas. Si el tiempo medio de permanencia en la página es bajo, penaliza.
Los medios sociales
- Que los autores tengan cuenta en Google + y sean activos en ella. Lógicamente su red social tiene más peso en las búsquedas que el resto.
- Que los autores de los posts tengan una comunidad fuerte, es decir, muchos seguidores en redes sociales o suscriptores en sus blogs.
- Que el contenido se comparta mucho. Cuantos más “me gusta”, “+1” o más altos sean los contadores para compartir en Twitter, Linkedin, Tuenti, etc., mejor.
- Que los posts sean enlazados desde otros sitios web… Pero cuidado con este punto, porque Google filtra y descarta los enlaces de páginas dedicadas exclusivamente a colocar enlaces (las denominadas link farms).
Como curiosidad, por si queréis conocer la importancia que vuestra página tiene en Internet, podéis utilizar esta herramienta gratuita de Google, Mi Page Rank, que otorga un valor numérico del 0 al 10 a cada web (URL), siendo 10 la máxima puntuación que se puede obtener.
Foto: ePublicist, distribuida con licencia CC BY-ND 2.0