No existe una campaña de marketing, pagada o no, que tenga tanto poder para influir en los usuarios como tus propios clientes. Ellos conforman el pilar de tu negocio, no solo por las ventas generadas, sino también por su influencia en el exterior. Si están satisfechos, pueden llegar a convertirse en portavoces de tu marca. Y lo mejor de todo es que no hay que pagarles nada, lo hacen de forma voluntaria porque les ha gustado su experiencia de compra y han quedado muy satisfechos con el trato.
Pero esta tarea de convertir a tus clientes en portavoces de tu marca no es tan sencilla como parece. Hay que invertir tiempo en llevarla a cabo.
¿Sabías que el 90 % de las personas confía en recomendaciones de marca si provienen de sus amigos? Y, por otro lado, el 70 % confía en las recomendaciones de otros clientes. Por tanto, esto significa que tus clientes son una pieza fundamental para tu negocio.
Cómo convertirlos en embajadores de tu marca
Para convertir a tus clientes en embajadores de marca, basta con seguir estos sencillos pasos:
1. Crea un plan de marketing para tus clientes
Pregúntate lo siguiente antes de avanzar: ¿qué estrategias de marketing estás utilizando ahora?, ¿qué quieres conseguir con la campaña que quieres lanzar?
Con la primera pregunta te darás cuenta de cuáles son los problemas más graves que tienes y quieres solucionar. Por ejemplo, si no sabes cómo recuperar a tus clientes perdidos, tus estrategias y objetivos deberán ir enfocados en esa dirección.
Después de identificar tus debilidades, tendrás que responder a la siguiente pregunta: ¿qué objetivos (realistas y medibles) quieres conseguir?
- Potenciar tu marca (conseguir mil seguidores más en Facebook en seis meses).
- Aumentar tus ventas (ganar 30.000 euros en el nuevo producto que vas a lanzar).
- Generar sentimiento de pertenencia y lealtad (conseguir 3.000 suscripciones en tu newsletter en seis meses).
Es importante identificar estos objetivos para saber qué pasos necesitas dar. Y además esto te ayudará a saber cuántos clientes necesitas para promocionar tu negocio.
2. Trabaja en estrategias de fidelización
Para fidelizar a tus clientes tienen que darse dos casos: tener un buen producto y ofrecer un trato excelente.
Pero, ¿cómo sabrás que los usuarios comprarán tu producto? Deberás asegurarte de que existe un mercado para ti. Has detectado una necesidad y quieres suplirla.
Te aconsejo que valides tu idea y compruebes si hay gente que estaría dispuesta a comprarte. Lanza una versión de prueba en tu web y observa cómo se comporta la audiencia.
Y la otra cuestión relevante, ¿cómo dar una experiencia única a tus clientes? Personaliza la experiencia todo lo que puedas y presta atención a sus necesidades reales.
3. Identifica a tus embajadores de marca
¿Cómo puedes identificar a estos clientes? Deben darse tres características: que tengan una cantidad de seguidores en sus redes, que sean consistentes (para generar confianza) y que tengan cierta autoridad para inspirarles y guiarles a que tomen una determinada acción.
Una herramienta que puede ayudarte a conocer la influencia social de alguien es Klout. Identifica a aquellos que creas que tienen el perfil de influencer y envíales un correo electrónico o encuesta corta preguntándoles por qué recomendarían tu negocio.
4. Ponte en contacto con ellos
El siguiente paso será ponerte en contacto con ellos e informarles de cuáles son tus objetivos. Puedes motivarles a que te ayuden a promocionar tu negocio con estas ideas:
- Explícales lo importante que sería para ti que dejaran su testimonio personal de su experiencia con tu marca en tu web o redes sociales.
- Motívales a que compartan ofertas exclusivas a sus seguidores.
- Pídeles que compartan tus posts en sus redes y que publiquen sus propios contenidos.
- Informa a tus clientes de los valores que compartes, tu misión, para que entiendan tu negocio lo mejor posible.
Según diversos estudios, la estrategia que mejor funciona es cuando el usuario crea su propio contenido. Así es como conectará con el usuario y este empezará a confiar en él.
Está comprobado que los anuncios que no tienen contenidos creados por los mismos usuarios no generan tanto engagement. Y lo mismo sucede con las imágenes en las que aparecen personas «anónimas». Estas crean más vinculación que las que muestran la imagen de un logo.
5. Premia a estos clientes
Una forma de valorar el trabajo que están haciendo tus clientes es premiándoles. ¿Cómo?
- Organiza un evento exclusivo para ellos.
- Ofréceles algún obsequio.
- Lanza promociones exclusivas para ellos.
- Envíales una muestra de tu nuevo producto (ellos serán los primeros en probarlo).
- Menciónales en tus redes sociales y página web (hazles sentir especiales).
- Regálales una tarjeta de puntos (y si la cumplimentan por completo, podrán optar a un premio).
Ya has recorrido suficiente camino si ofreces un buen producto y una excelente atención. Tus clientes se aliarán contigo sin dudarlo y se convertirán en embajadores de tu marca.
Pero debes poner de tu parte y proporcionarles todas las herramientas que necesiten para desarrollar la estrategia de promoción. La gran ventaja es que no tienes que pagarles nada y ambos os beneficiáis.
¿Has probado ya esta nueva estrategia para promocionar tu negocio? ¡Cuéntanos cómo te ha ido!