Cada día nacen nuevas startups digitales cuyo origen es una idea inicial convertida en un proyecto que necesita financiación para materializarse. Durante un tiempo determinado el emprendedor está recopilando la información de mercado, estudiando la viabilidad, preparando un plan de negocio y finalmente buscando inversores. Y aquí es donde entran los business angels, que -como sabéis- son inversores que aportan el capital necesario para iniciar el proyecto, además de sus conocimientos empresariales y del sector en el que se desenvuelva dicho proyecto.
Durante los últimos años trabajando como director y tutor de eCommerce y Cross Channel en reconocidos institutos, he tenido el placer y la gran suerte de ayudar, colaborar y participar como profesor de posgrado en la realización de proyectos exitosos que finalmente empiezan a “caminar” en el mundo digital, gracias a la inversión de otras personas.
Pero la pregunta es: ¿qué quiere saber y escuchar el inversor antes de decidir “comprar” tu proyecto?
De eso me gustaría hablar hoy, del proyecto final o mejor dicho del trabajo y realización de la presentación oral ante un business angel, que decidirá si tu proyecto es viable o no y valorará si su inversión será rentable al menos a cinco años vista, con un retorno de la inversión diez veces superior a su aportación.
En muchos casos, los emprendedores no saben qué contar o explicar delante de los inversores. El proyecto es clave, pero no detectan qué información es especialmente sensible para el otro. Toda la información que exponen es importante, pero no por ello tiene que ser relevante para el proyecto, y aquí es donde surgen las dudas a la hora de seleccionar la información que se visualizará en Prezi o en PowerPoint, y que será la tarjeta de presentación del proyecto.
A mi modo de ver, esta tarjeta de presentación debe contener cinco puntos clave, además de saber explicar el proyecto en público en las primeras reuniones de contacto y responder a las preguntas que se realicen. Imaginemos que el proyecto es una plataforma de comercio electrónico o digital, además de tener un dossier con toda la información hemos de tener claro estos cinco puntos:
Quién
Lo primero es la presentación de las personas que conforman el equipo de trabajo, seguido de una descripción breve del resumen ejecutivo, donde se expone el análisis interno de la empresa y un análisis externo de la situación de mercado del sector en el que se desenvuelva. Y así detectamos quién será nuestro público objetivo y a quién nos dirigimos.
Qué
Lo segundo es exponer qué queremos. Si tenemos claras y bien definidas nuestras metas y objetivos, podremos realizar un análisis DAFO, analizando las características internas (debilidades y fortalezas) y la situación externa (amenazas y oportunidades). Pero no es suficiente con realizar el análisis de las cuatro categorías del DAFO, es importante también cruzar esta información para diseñar la estrategia que se seguirá. En función de los datos analizados, se deberá explicar qué vamos a hacer al respecto, con conocer la información no es suficiente, lo importante son las acciones que se llevarán a cabo, el cómo lo haremos.
Cómo
En este punto no sólo es fundamental el cómo lo haremos, sino también el qué haremos. Dentro de este tercer punto destacan cuatro puntos:
- Explicar qué herramientas tecnológicas vamos a usar. Exponer el diseño web, la usabilidad, los medios de pago, la logística y otras herramientas que añadan valor al proyecto.
- Saber cómo desarrollaremos la estrategia digital. Es aconsejable que en el dossier de presentación esté bien definida y en la presentación se haga mención de las acciones más importantes. Estrategias de marketing digital tales como el posicionamiento SEO, de captación, de conversión, de contenidos, de branding, de campañas SEM, y todas ellas con un plan operativo bien definido.
- Definir la estrategia en redes sociales, y acompañarla, a ser posible, de un análisis de la competencia. Antes de definir las estrategias es primordial conocer en qué redes tendremos presencia y dónde está nuestro público objetivo. Seguidamente hemos de preparar un plan de acción para cada una de ellas.
- Definir cómo vamos a medir todo el plan de acción y qué acciones realizaremos en caso de desviación. Los KPI (Key Performance Indicators) van ligados a la estrategia del proyecto y será vital conocer de primera mano los indicadores de la situación actual de las metas y objetivos, medir los niveles de crecimiento y captación, de conversión y de fidelización, de servicio y de rentabilidad del proyecto. Es obligatorio calcular el ROI (Return On Investment) para poder avanzar en una buena dirección. Si tenemos conocimiento en tiempo real de las desviaciones, es más probable que se puedan poner en marcha medidas para corregirlas antes que sea demasiado tarde.
Cuándo
El cuarto punto para la presentación es conocer en cuánto tiempo lo vamos a realizar. Definir una línea de tiempo para la ejecución del proyecto permitirá estudiar si va a ser rentable en un periodo corto, medio o largo para el inversor.
Cuánto
Definir un plan financiero con todos los datos bien claros, presupuestos, inversiones iniciales y previsión del retorno de la inversión. Este punto será clave si se desea obtener financiación de un business angel y deberá estar perfectamente detallado y justificado para que el proyecto se ajuste a la realidad.
A mi modo de ver, y si tuviera que “comprar” un proyecto, me gustaría escuchar estos cinco puntos antes de entrar a estudiar bien toda la información sobre el mismo. ¿Crees que falta algún dato o información importante?
Foto: UnB Agência