Las tradicionales funciones de gestión de personas están en una profunda crisis, pues no pueden hacer frente a los escenarios de hipercompetitividad y de aceleración del cambio. Por ello, deben construir un nuevo paradigma que ofrezca soluciones a la necesidad de innovación, cuyo motor de cambio son las tecnologías sociales.
El futuro de Recursos Humanos es la innovación en red. Cuanto antes aprendamos cuáles son sus bases y fundamentos, antes podremos dar respuesta a las necesidades de nuestras empresas.
La misión de RR.HH.: ofrecer solución al principal reto empresarial
El principal reto empresarial es la innovación. La necesidad de innovación está provocando cambios profundos en el management tradicional y lo ha puesto en crisis. Cada vez es más frecuente que pequeñas empresas, “nuevos entrantes”, competidores en un mercado, desplacen a los líderes y/o eliminen a las empresas establecidas.
El éxito o fracaso en la innovación empresarial es la supervivencia o muerte empresarial. Por ello las empresas ya saben que deben ser muy efectivas en gestionar la innovación.
Este nuevo paradigma que dota de más inteligencia y capacidad de adaptación a las organizaciones provocará profundos cambios en los sistemas organizativos, especialmente en aquellos que afectan a las áreas del talento de las personas, pues no es posible hablar de innovación sin hablar de personas.
Las organizaciones deberán desarrollar nuevos conocimientos y funciones para asegurarse de que gestionan adecuadamente el talento de las personas y este talento (conocimiento, competencias y emociones) cada vez más se gestionará en red.
Los cinco fundamentos de la innovación en red
Las nuevas funciones de RR.HH. deberán focalizarse en cinco aspectos fundamentales:
- La gestión de personas en red: las tecnologías sociales son una de las nuevas bases de la función de RR.HH. La inteligencia colectiva, la creatividad, la comunicación transversal o el aprendizaje en red son procesos de gestión que las tecnologías 2.0 ayudan a potenciar. Necesitamos nuevos procesos más participativos que de forma descentralizada y ubicua potencien el talento y el aprendizaje. Por ello, las comunidades y las tecnologías sociales serán las principales herramientas de trabajo de los nuevos profesionales de RR.HH.
- La gestión del cambio y la innovación implican nuevas culturas organizativas que promuevan la flexibilidad y la eficacia en el desarrollo de nuevas estrategias. Los sistemas de creación de ideas y sobre todo crear las condiciones que favorecen su implantación serán las principales asignaturas de RR.HH. Las preguntas que deberán hacerse hacerse son: ¿Cómo se reconoce y recompensa la participación, creatividad e innovación? ¿Cómo se crea una cultura de startup y se crean entornos de aprendizaje y experimentación rápidos? ¿Cómo se fomenta la sistemática del cambio disruptivo o de la mejora continua?
- El socialnetworker es un nuevo empleado con nuevos valores que favorecen la innovación, pues busca la autonomía, odia el control innecesario, es responsable con el autodesarrollo de su carrera profesional y se conecta a redes internas y externas. Todos ellos son valores que se asemejan a los de las generaciones Z, que poco a poco ocuparán el poder en nuestras organizaciones. Este nuevo empleado, el Knowmad artesano, tiene en su ADN la flexibilidad, la creatividad e innovación permanente, pero necesita ser gestionado de otra forma mediante transparencia y valores postmaterialistas, lejos de la burocracia y del “ordeno y mando”. Requiere nuevos procesos de gestión de personas.
- Un líder transformador al servicio de la intraemprendeduría y el liderazgo neuronal distribuido, un líder cuyo fin es crear un entorno innovador con equipos y comunidades de alto rendimiento, entornos afiliativos con libertad creativa y eficiencia innovadora. Es un líder de socialnetworkers que puede liderar en red con nuevos valores, con capacidad de “inspirar” a trabajadores muy exigentes en cuanto a las cualidades e inteligencia emocional de sus responsables. La primera misión de los responsables de RR.HH. será asegurar este tipo de liderazgo en sus empresas.
- La gestión del talento en empresas abiertas dificulta la separación entre talento interno y externo, entre comunidades internas y externas. Esta separación será cada vez más difusa, pues la eficacia en el diseño de nuevos productos, la producción de nuevos servicios se apalanca más en lo externo: conversaciones con clientes, alianzas empresariales, soporte de especialistas… Aprovechar la potencia de empresas y profesionales cercanos (ecosistemas locales) y las ideas y servicios de profesionales lejanos conectados en red será más frecuente y relevante para todos los profesionales y un reto en el reclutamiento y gestión de profesionales con contratos más flexibles y temporales.
Efectivamente, la innovación cambiará todos los paradigmas empresariales, pero especialmente la gestión del talento de las personas, para que se convierta en la principal ventaja competitiva empresarial. Este hecho, junto con la emergencia de las redes como potenciadores de los nuevos mecanismos de aprendizaje y por tanto de adaptación e innovación, hará cambiar lo que hoy conocemos como RR.HH. ¿Estás preparado?
Imagen: @jenny downing distribuida bajo licencia Creative Commons BY-2.0