ACTUALIZACIÓN: 23 de noviembre de 2018
No hay duda de que la crisis económica, la mayor globalización, el auge del comercio electrónico, la liberación de los periodos de rebajas y la subida del IVA han provocado que el comercio, tanto offline como online, aproveche cualquier oportunidad que se le brinde para incrementar sus ventas. Y, para ello, ha optado por campañas publicitarias mucho más agresivas que a las que los consumidores estábamos acostumbrados. De ahí que campañas con un origen histórico y cultural arraigado en un país concreto, alcancen una mayor repercusión en otros países ajenos a esas costumbres. Es el caso del Black Friday o Viernes Negro.
¿Cuál es el origen de Black Friday?
El término se originó a principios de los años 60 en Filadelfia, Estados Unidos, a raíz de la gran intensidad de tráfico que generaba en las carreteras americanas el día siguiente a la celebración del Día de Acción de Gracias. Una celebración tradicional americana y, también, canadiense, como agradecimiento a una buena cosecha y para celebrar junto a la familia el trabajo duro. Más tarde el término ‘negro’ se asoció a las cuentas bancarias de los comercios, que veían cómo los números rojos pasaban a negros gracias a las ventas generadas en ese viernes. Y, de ahí, ha pasado a ser el arranque de la campaña comercial de Navidad para los comercios. Es un buen momento para que las familias americanas comiencen este fin de semana largo, de cuatro días, tan poco común en este país, a realizar las primeras compras navideñas.
¿En qué consiste?
Básicamente todos los comercios físicos y online lanzan campañas promocionales con descuentos de hasta el 70% en algunos productos desde el viernes hasta el domingo. Y, concretamente, en el caso de las tiendas virtuales hasta el siguiente lunes, 26 de noviembre, pues coincide con la celebración del día de compras por Internet denominado Ciberlunes o eDay. Incluso algunas empresas ‘madrugadoras’ han comenzado este pasado lunes ya con su Semana Black Friday alargando los días de esta campaña aún más.
El tipo de productos que se venden es de lo más variado, pero si analizamos los datos más en detalle a lo largo de los años que se viene celebrando este Viernes Negro en Estados Unidos, los productos electrónicos como la televisión, los portátiles, tablets y smartphones son los que tienen un mayor crecimiento de ventas, seguidos de los videojuegos, consolas y juguetes. Este año se espera que dentro de las ventas de juguetes los productos más demandados serán todos los relacionados con la última película de Disney, Frozen, los guardianes de la Galaxia y Lego.
Además de estos productos, hay empresas de tecnología que aprovechan estos días para comercializar los desarrollos de apps específicas para que se puedan localizar las mejores ofertas por producto, marca o tienda e incluso para encontrar aparcamiento, o las empresas de venta colectiva para cupones que incentiven la compra.
En cuanto a las empresas que mayor cantidad de ventas suelen generar, destacan los supermercados Walmart, Amazon, Toys R Us y los centros comerciales Macy´s.
Ventajas para los comercios
Para los comercios es una buena ocasión para incentivar al consumidor a adelantar las compras de Navidad produciendo más gasto que si las compras se realizasen en los últimos días antes de las fechas navideñas.
Otra razón de peso para que los comercios apliquen esta campaña es la de intentar obtener un mayor volumen de ventas en el mes de noviembre que, en general, es de los peores en términos de ingresos para las tiendas.
Supone, a su vez, la posibilidad de captar nuevos clientes, que si no fuese por estas atractivas ofertas y descuentos agresivos no comprarían determinados productos.
Y otra ventaja es la posibilidad de dar salida a productos menos demandados y, por lo tanto, reducir excedente de stock antes de que termine el año.
Black Friday en España
En España este viernes, 23 de noviembre, será octavo año consecutivo en el que grandes marcas se subirán al carro del ‘Viernes Negro’. Entre ellas, el Corte Inglés, Inditex, Mango, H&M, Decathlon, Apple, Carrefour e incluso los bancos y agencias de viajes. Estoy convencida de que poco a poco se irán uniendo más grandes marcas y seguramente pequeñas y medianas empresas, porque la situación del comercio en España no está para perder oportunidades de hacer más caja.
En resumen, Black Friday es indudablemente otra campaña más para aumentar las ventas y hacer el esfuerzo final para conseguir los objetivos comerciales antes de que finalice el año.
Foto: Sam DeLong