Las relaciones de trabajo, la experiencia del cliente, la omnicanalidad, la competencia, las redes sociales, la logística…, las empresas son realidades menos sólidas y más líquidas. El concepto de “líquido”, como metáfora de la actual sociedad digital, acuñado hace más de 20 años por Zigmunt Bauman, lejos de quedar obsoleto, cada día cobra más actualidad.
Si nos centramos en las empresas, las fronteras entre sectores ya no están claras y eso lo encontramos tanto en grandes empresas como en pymes.
Todo está cambiando. Así, por ejemplo, vemos cómo el piso turístico se consolida como un competidor directo de los hoteles por el turismo familiar español, el sector de restauración tiene que competir con planes gastronómicos en casas particulares (“Airbnb de la comida”), Google entra en el mundo de la banca, Inditex es un gigante de la logística invisible, y la lista es interminable.
Big Data, una cuestión de supervivencia
La relación entre quien ofrece un producto y quien tiene una necesidad concreta ha cambiado. Internet y las nuevas tecnologías han impulsado nuevos modelos de consumo, están transformando la naturaleza de las empresas:
- El primer cambio fue de empresas de productos a empresas de servicios.
- El segundo cambio es que se están convirtiendo en empresas de datos.
- Y en un tercer cambio, los datos se conectarán al mundo físico por medio del Internet de las cosas (IoT) y de la inteligencia artificial (IA), lo que dotará a los productos y servicios de inteligencia.
«Transformación data driven« se ha convertido en el término que aparece en todos los foros empresariales, superando incluso al de transformación digital; porque conocer al cliente ya no va a ser suficiente, va a ser necesario anticiparse a sus necesidades para ofrecerle lo que realmente necesita y fidelizarlo.
Y para conseguir esto, el Big Data y la Analítica Avanzada no van a ser una cuestión de diferenciación, sino de supervivencia en todas las áreas de actividad.
Las empresas pueden tener más y mejores datos de su funcionamiento, acertar más en su toma de decisiones, personalizar al máximo sus productos y servicios, desarrollar nuevos productos más innovadores y obtener una visión 360º de sus clientes.
Nuevos modelos de consumo
Ante un turista permanentemente conectado que busca experiencias personalizadas, las soluciones de Big Data serán aliadas imprescindibles para conocer patrones de comportamiento con los que afrontar los retos del sector turístico.
Para aquellos sectores donde existe una deslocalización de la producción, donde el cliente es cada vez más digital, donde los tiempos de entrega de los productos son menores y los niveles de exigencia son mayores, será imprescindible contar con tecnologías de Big Data, IA e IoT para poder interpretar toda la información y conseguir una visión global de los procesos de la cadena logística.
Lo mismo ocurre en las empresas donde es clave optimizar la cadena de producción. La gestión y el análisis del enorme volumen de datos de sus sistemas proporcionará las palancas para obtener una mayor eficiencia del sistema productivo y generar ahorros de costes.
En mercados saturados, como el de los retailers, en pleno proceso de transformación operativa y organizativa, con consumidores altamente informados y que demandan una experiencia de usuario omnicanal, el poder de los datos será imprescindible para optimizar las redes de ventas y desarrollar nuevos modelos logísticos.
El mejor aliado en Big Data
Y para acompañar en esta transformación data driven, Telefónica es el mejor aliado. El informe publicado por Forrester Wave™ evalúa los nueve proveedores de insights del sector más destacados, y sitúa a LUCA, la unidad de datos de Telefónica, como líder.
El informe señala que “directivos de todos los sectores reconocen la necesidad de sus organizaciones de transformarse digitalmente y que las estrategias impulsadas por los insights deben ser una prioridad de las empresas”.
Gracias a los insights obtenidos a partir de los datos, las empresas pueden ofrecer una oferta diferencial y más competitiva a los usuarios.
El MIT (Instituto Tecnológico de Massachusetts) aporta también estudios sobre esta materia y asegura que las empresas que toman decisiones basadas en los datos que generan y analizan tienen un 4% más de productividad que la media y un 6% más de beneficios. Y desmiente un tópico muy extendido en el mundo de las pymes y las startups:
La intuición es muy romántica y a los emprendedores les encanta usarla, pero no es fiable.
Imagen: Noupload