En muchas ocasiones tenemos una idea para desarrollar o un proyecto donde convergen los elementos social, local y móvil (SoLoMo), pero no sabemos bien cómo rentabilizarlo. Es necesario hacer una reflexión previa y tener en cuenta cuál es el modelo de negocio que vamos a utilizar.
Por otra parte, el elemento básico de un negocio es el producto o servicio que se vende y el contenido que se genera para mostrarlo. Pero la clave está en distribuirlo. Por eso en este artículo vamos a realizar un repaso general sobre los actuales modelos de negocio identificados en la web para distribuir contenidos digitales.
Los contenidos digitales, además de ser una nueva modalidad tecnológica para la distribución, comercialización y el consumo de los contenidos, abren la puerta a nuevos modelos de negocio y dan oportunidades a los agentes que participan en la cadena de valor de los contenidos y a otros nuevos entrantes.
Algunos autores, como Afuah y Tucci (2001), establecen que un modelo de negocio debe definir la forma en la que las empresas planifican hacer dinero a largo plazo usando Internet.
Tipos de modelos de negocio para la distribución de contenidos
1.- Modelo de corretaje (Brokerage). Los corredores (brokers) son creadores de mercados: ellos atraen y enlazan a compradores y vendedores y facilitan las transacciones.
2.- Modelo del comerciante (Merchant): mayoristas y minoristas de bienes y servicios. Las ventas pueden estar basadas en listas de precios o en subastas. Engloba a distribuidores de bienes y servicios, tanto mayoristas como minoristas. El núcleo del negocio es la venta, aunque se pueden presentar de muy diversas formas, tales como subastas, venta directa de almacén, tiendas que ofrecen sus productos online, venta de bits (música, software, libros).
3.- Fabricante (Modelo directo): está fundamentado en la capacidad de la web para permitir a un fabricante (por ejemplo una compañía que crea un producto o servicio) encontrar compradores directos y de ese modo reducir el número de agentes del canal de distribución. El modelo debe estar basado en optimizar la eficiencia, mejorar el servicio de atención al usuario y mejorar el conocimiento de las necesidades de nuestros usuarios finales.
4.- Modelo de afiliación: en contraposición con el portal generalizado, que pretende captar un alto volumen de tráfico hacia un único sitio, el modelo de afiliación pretende captar oportunidades de venta en otros portales a través de la transmisión de incentivos económicos a otros portales, que se convierten en afiliados, para que ofrezcan sus servicios a los usuarios. Esto podría hacerse con una cesión de un porcentaje de la venta.
5.- Modelo de comunidad: este modelo se fundamenta en la fidelidad de los usuarios, quienes invierten tiempo y emociones en la comunidad. La ganancia debe basarse en la venta de productos o servicios auxiliares o complementarios al servicio principal, o en contribuciones voluntarias de los usuarios. Otra opción es que la ganancia se consiga a través de la publicidad contextual en los servicios gratuitos, y con cuotas de suscripción en los servicios premium.
6.- Modelo de suscripción: se carga a los usuarios una cuota periódica -diaria, mensual o anual- por suscribirse al servicio. Es común en portales que combinan contenidos gratuitos con contenidos o servicios premium. Los modelos de suscripción y publicidad se combinan frecuentemente.
7.- Modelo de utilidad o de servicio: Este modelo, también denominado «bajo pedido» (on-demand) se basa en el “pago por uso” de un producto o servicio, método de pago inmediato. A diferencia de servicios de suscripción, los servicios medidos están basados en las tasas de uso real.
Un consejo: coge un papel en blanco, un lápiz y piensa en tu producto, qué es lo que vendes, qué contenido generas sobre el mismo y cómo lo distribuyes en Internet. Echa un vistazo a estos modelos de negocio e identifica el que usas en la actualidad y cuáles son interesantes para utilizar en un futuro. Y sobre todo cuéntanos tu experiencia.
Imagen @zaqi distribuida con licencia Creative Commons BY-SA 2.0