Lo nuevo no siempre es lo mejor, ¿o sí? En un mundo en el que la venta de productos y servicios a través de plataformas online se ha disparado, los usuarios están prácticamente obligados a estar al día de las más modernas técnicas de marketing para atraer a posibles clientes. Es por esta razón por la cual conceptos como leads, SEO o landing pages ya no nos resultan extraños en nuestro vocabulario comercial. Si queremos que nuestro negocio prospere en un entorno como éste, hemos de ser los primeros en dominar estas acciones, pero ¿qué ha pasado con las tácticas de la ‘vieja escuela’?
Dejando a un lado los innegables avances tecnológicos que se han sucedido en los últimos años, la realidad es que podemos vender en Internet utilizando técnicas de ‘marketing tradicional’. Es más, la mayoría de las grandes marcas del mundo ecommerce han obtenido un notable éxito readaptando acciones comerciales ya existentes. El único requisito, conocer el canal y optimizar los recursos.
Promociones, boletines, períodos de prueba… el mundo digital ha tomado prestadas innumerables técnicas del marketing tradicional. A continuación vamos a centrarnos en cinco de las acciones comerciales que mejor se han adaptado al entorno 2.0:
Contenido gratis y promociones
La posibilidad de conseguir descuentos, acceder a promociones o simplemente descargar contenido gratis (como ebooks) sobre una marca o sector suponen una gran oportunidad para atraer visitantes hacia nuestra página web. Bajo este reclamo se esconde un objetivo, cosechar leads. Por eso este tipo de acciones vienen acompañadas de formularios, páginas de aterrizaje o llamadas a la acción, con las que podremos obtener los datos de nuestros posibles clientes. Si no conseguimos que consuma nuestro producto o servicio en el momento del lead, al menos tendremos información valiosa que nos permitirá retomar el contacto más tarde. Esta técnica típica de inbound marketing no es nueva; es algo así como la ‘muestra gratuita’ del mundo offline, una forma de acercar nuestra empresa al público.
Emailing y newsletter
Los correos siempre han sido (y seguirán siendo) una forma muy socorrida, barata y efectiva de contactar con nuestro público con un objetivo comercial. Retomando el anterior punto, si tenemos una buena base de datos de clientes (o posibles clientes), podremos contactar con ellos siguiendo una estrategia previamente definida. Para que el correo electrónico sea efectivo, debe aportar un valor al usuario. Antes de enviar nada, debemos definir el objetivo del email, segmentación, diseño y optimización del contenido. La máxima es la siguiente: sin personalización no hay conversión. En esta infografía encontraréis 15 ideas para mejorar la tasa de apertura de vuestros correos.
Prueba gratuita
Los versiones gratuitas (free) de cualquier producto ofrecen una prueba para convencer al usuario de la necesidad de contratar el servicio. El modelo free trial es el que siguen actualmente la mayoría de aplicaciones y software de gestión. Suponen una toma de contacto perfecta con la herramienta; el consumidor se acostumbra a ella y, finalmente, acaba por adquirirla. Es algo así como ‘vender sin vender’, ya que el potencial comprador no siente la presión inminente de tener que adquirir el artículo. Si realmente hay una necesidad por el servicio en el público, esta técnica de marketing tradicional es de lo más efectiva.
Recomendaciones
¿Recordáis el famoso lema de ‘busque, compare y si encuentra algo mejor, cómprelo’? Un eslogan efectivo que no puede estar más de actualidad. Las recomendaciones siempre han influido notablemente en los procesos de compra de los usuarios. Buscamos una figura de confianza que nos asesore, y por eso recurrimos a la opinión de personas con nuestras mismas características. Hoy, Internet ha abierto una puerta para que la comparación de productos sea algo normal, necesaria incluso antes de adquirir un artículo.
Por ello, los usuarios utilizan las redes sociales o las valoraciones de los grandes portales colaborativos para valorar y puntuar cualquier servicio. Nuestro público está acostumbrado a realizar ROPO, showrooming, etc. En este sentido, es vital construir una buena estrategia de branding digital, para poder influir en las decisiones de compra de nuestros posibles clientes.
Publicidad online
La inversión publicitaria pasa por ciclos, antes y ahora. En la actualidad, las fórmulas de promoción online son casi infinitas, y ofrecen algo que los anuncios tradicionales no incorporaban: la segmentación. Con las técnicas de SEM, publicidad display o social ads podemos centrarnos en un público objetivo muy concreto, un sector de público más afín a nuestra marca, con más posibilidades de convertirse en clientes.
Lo nuevo no es mejor, únicamente es diferente. La mayoría de las técnicas de marketing online tienen su origen en acciones offline que, por su efectividad, siguen estando presentes en cualquier estrategia comercial digital. Eso sí, el mundo 2.0 trae una clara ventaja, la segmentación y personalización de los mensajes, factores con los que podremos favorecer la conversión.
Foto: Perceptions (off)