Tras meses, que parecen años, de pandemia y con los constantes cuidados que genera, los consumidores no son los mismos. Por eso lo invitamos a descubrir algunos de los principales cambios en sus hábitos de consumo.
Es un fenómeno global, los consumidores están cambiando. Para la muestra en México, el 56% de los consumidores ha abandonado el uso del dinero en efectivo. Y si bien era una tendencia que ya estaba creciendo la pandemia la aceleró.
Bajo esta misma perspectiva era lógico el surgimiento de aplicaciones para el manejo de finanzas desde la casa. En el caso colombiano, y para mediados del 2020, las sedes bancarias registraron una disminución del 33% en las sedes tradicionales.
De igual forma, y potenciada por las restricciones del confinamiento las entregas de domicilios se dispararon en el 2020. De hecho, el 45% de todos los servicios de comida en Colombia fueron entregados por esta vía.
Teletrabajo y autocuidado
Otro de los grandes cambios originados en el segmento empresarial fue el surgimiento del teletrabajo con todo lo que representa trabajar desde el hogar.
De esta forma, se presentaron casos opuestos como el de los nómadas digitales que buscan climas más cálidos y agradables donde vivir, alejados de las grandes ciudades. Y, por otro lado, los que decidieron transformar sus hogares para trabajar más cómodamente.
Estos últimos fueron los responsables para que el comercio electrónico de elementos ergonómicos, enviados a hogares, aumentara un 200% en el 2020.
Otros elementos que crecieron en el comercio electrónico regional fueron los elementos de aseo y salud. Según Nielsen, el segmento de las farmacias se encuentra actualmente dentro de los seis ejes más importantes del comercio electrónico.
Cuidado de las finanzas
La incertidumbre generada por la pandemia también generó una mayor prudencia dentro de los consumidores que temen por la estabilidad laboral y el futuro de sus empresas. Por lo mismo se ve un mayor consumo en cadenas de almacenes de bajo costo y productos saludables, para cocinar en casa.
Al mismo tiempo, existen perfiles de consumidores que se vieron potenciados con la pandemia como es el caso de los entusiastas digitales. Aquellos que ya venían usando apps y la tecnología como un elemento fundamental de sus vidas.
Otro perfil de usuario, el de los activistas empoderados, aquellos que se preocupan por el impacto de su consumo en el planeta y que ayudan con obras sociales, se ha visto reforzado por el impacto del virus en la sociedad.
Pero estas son apenas algunas de las tendencias registradas porque la pandemia sigue y nos está cambiando a todos.