Desde la primera web de la historia en 1990, basada en un sistema sencillo de html, con un diseño plano, estático, que dominó Internet durante los inicios, formada ‘sólo’ por menús, textos e hipertextos, para recopilar y enlazar información de manera unidireccional, se pasó al enriquecimiento de los sites con imágenes, diseños más sofisticados y vídeos. Aquella web 1.0 fue la predecesora de las versiones que llegaron después.
Con la aparición de los foros y las redes sociales de finales de los 90 y principios del siglo XXI, comenzó una alargada década de interacción bidireccional entre usuarios y páginas webs, dando paso a la web 2.0, donde los gestores de contenidos (Content Management System –CMS-) se convirtieron en las plataformas por excelencia.
En la actualidad, hemos llegado a la confluencia entre la web 3.0 (con el almacenamiento en la nube y la interacción personalizada) y lo que podría ser la web 4.0, que incorpora inteligencia artificial y big data. De este modo, se ha generado algo parecido a una web 3D, que pone por delante la experiencia interactiva y memorable del usuario, y que facilita a las empresas su creación y mantenimiento. Así, mediante herramientas y plataformas de diseño visual -sin código aparente-, quienes no son especialistas, como pueden ser las pymes, pueden generar sus webs con total libertad creativa y técnica.
Hoy en día, la web se ha transformado en la puerta obligatoria de entrada del negocio de la mayoría de las organizaciones, tanto que algunas empresas comenzaron a vender de forma digital y decidieron que sería su único escaparate, junto con las aliadas redes sociales.
Comercio electrónico, al alza
Según los últimos datos de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), el comercio electrónico superó en España los 18.900 millones de euros en el tercer trimestre de 2022, un 28,8% más que el año anterior.
Y aunque la inversión en publicidad digital ha aumentado en un 9,2%, los métodos por los que más llegan los productos y servicios a la gente continúan siendo el boca a boca y los motores de búsqueda, por encima de otro tipo de publicidad, según el informe Digital 2023 España.
Por otra parte, aunque el entretenimiento sigue siendo la locomotora digital (el 75% de los usuarios escucha música a través de Internet y el 65% ve vídeo en streaming), un 55% de la población compra a través de Internet, tal y como indica el recién presentado informe de Telefónica La Sociedad Digital en España 2023.
Diez elementos clave en tu web
Si quieres vender más y mejor desde tu sitio web, ten en cuenta estos diez elementos. Y si no tienes ni idea de por dónde empezar, apóyate siempre en los conocimientos de los expertos.
1. Nombre de dominio
Debe ser claro y fácil de recordar. Recuerda que será tu carta de presentación.
2. CMS (sistema de gestión de contenidos)
Ya sea WordPress, Joomla, Genially, Drupal o cualquier otro del mercado, elige el que te resulte más intuitivo y sencillo, y el que tenga la relación más amigable y efectiva con los buscadores.
3. Diseño
Hay que optar por un diseño limpio, visualmente atractivo y en consonancia con la imagen y el estilo de marca. Entre la cabecera (header), el cuerpo (body) y el pie de página (footer), debe estar toda la estructura de la web, con enlaces a sus páginas.
Por supuesto, ha de ser responsive (adaptable a los distintos formatos de dispositivos móviles). Si es accesible para la diversidad de tus clientes, mejor; y, para nota, que sea UI (User Interface), es decir, que el diseño esté integrado en la estrategia digital y guíe al usuario a navegar por donde queremos (producto/servicio, lead, respuesta a formulario, compra, etc.).
Para este tipo de diseño, todo en la web (menú, secciones, contenidos, CTA –call to action-, imágenes, vídeos, atención al cliente, etc.) debe estar pensado para que el usuario obtenga la mejor experiencia de usuario (User experience –UX-), aunque esa UX se obtenga no solo de la web, sino también de aspectos como la respuesta e interacción en las redes sociales, la calidad del producto o servicio, o la atención al cliente (incluida la preventa y la posventa, con el seguimiento), entre otros.
4. Velocidad de carga web
Es imprescindible un tiempo de carga rápido de todas las páginas de nuestro sitio web. Depende de factores como el servidor, lenguaje de programación, contenido de la web, velocidad de conexión, capacidad y tipo de dispositivo, navegador, etc.
Si tu web no carga entre 2 y 8 segundos, seguramente perderás clientela, tanto la que tengas como la que pueda llegar por vía digital.
5. Símbolos de confianza y seguridad
El hecho de que la web cuente con protocolo de transferencia de hipertexto seguro (https) genera confianza en el sitio. Asimismo, otros símbolos como insignias de seguridad, certificados SSL e iconos de pago, para que los clientes sepan que su información personal está segura cuando realizan una compra en la web, puede ayudar a generar más ventas.
6. Navegación sencilla
Es fundamental ofrecer un menú de navegación claro, que permita acceder a todo el contenido de la web, sin tener que dar vueltas ni buscar. Aunque siempre es útil contar con un buscador de contenidos indexados en nuestra web, así como categorías y funciones de búsqueda que faciliten a los usuarios a encontrar lo que persiguen.
7. Secciones que no pueden faltar
Entre las secciones que debe tener una web, las siguientes son fundamentales:
- Quiénes somos: es la ventana que informa sobre tu compañía y equipo, visión, misión y valores. Una web con este tipo de apartado genera mayor cercanía y confianza.
- Productos y servicios: es el escaparate de lo que quieres vender, por lo que debes mostrar esta sección de manera atractiva, con descripciones detalladas, claras, convincentes, con conocimientos técnicos, pruebas o muestras, beneficios del producto o servicio, a través de imágenes y vídeos sugerentes, catálogo completo… Es importante destacar el valor y distinguirse de la competencia, transmitiendo cómo puedes resolver los problemas o satisfacer las necesidades de tus clientes.
- Chat o sección de consulta y ayuda (Frequently Asked Questions –FAQ-): debe responder en tiempo breve las dudas del público interesado en lo que ofreces.
- Blog: con contenidos propios, profesionales y relacionados con el sector al que perteneces. También sobre tus productos y servicios, el equipo humano, apariciones en prensa, entrevistas, vídeos, curiosidades, etc.
- Contacto: cuantas más vías de contacto se incluyan, más fácil será que el potencial cliente acceda a la empresa y, por tanto, a su compra.
- Enlaces a redes sociales: otro imprescindible, con opción de compartir contenidos de la web en las redes sociales del usuario.
- Aviso legal y políticas de privacidad: activación de cookies, uso, tratamiento y almacenamiento de datos personales (si los hubiera), datos de la empresa, medidas de seguridad, y demás exigencias legales. Una sección en la que siempre es bueno que nos asesore un experto legal.
8. Botones de llamada a la acción (CTA)
Menos es más, y si está bien pensado, mejor. No es bueno atiborrar de publicidad y llamadas a la acción al usuario, porque podemos hacer que huya ante la saturación.
Sin embargo, se pueden planificar campañas calendarizadas que nos ayuden a lograr nuestro objetivo, con CTA para, por ejemplo, participar en un sorteo, hacer una compra exclusiva, obtener un descuento, suscribirse a una newsletter, rellenar un formulario a cambio de una suscripción, un ebook gratuito o un descuento; contactar por teléfono, email, Whatsapp o redes sociales, hacer una reserva, solicitar presupuesto y otras tantas ideas para vender más.
No debemos olvidarnos de situar botones visibles, colocados estratégicamente, para guiar a los visitantes hacia la compra: “Añadir al carrito”, “Registrarse”, “Comprar ahora”, etc.
9. Testimonios y opiniones de clientes
La publicación de testimonios y reseñas positivos de clientes satisfechos, tanto en un lugar destacado de la propia web como en Google, redes sociales o plataformas de consumo, puede ayudarte a conseguir clientes ‘simplemente’ del boca a boca, infundir confianza en los productos y animar a clientes potenciales a realizar una compra.
10. Información clara sobre precios y envíos y proceso de pago sencillo
Hay que mostrar claramente los precios de los productos, las tarifas de envío y cualquier pago o cargo adicional, y evitar costes ocultos o sorpresas durante el proceso de compra, para no provocar la pérdida de ventas. Además, es necesario ofrecer un proceso de pago ágil, seguro y fácil de completar.
Un producto o servicio de calidad es la base para ofrecer desde la web corporativa una experiencia de usuario fluida, a través de una comunicación honesta y de confianza que destaque claramente el valor de los productos y servicios. Si incorporas estos diez elementos, podrás optimizar tu sitio web para vender más y mejor.
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