En un mundo hiperconectado las empresas tienen que competir para hacerse oír en medio de noticias falsas, redes sociales, cadenas de chismes en Whatsapp y vídeos de gatos. La clave para diferenciarse recae en el content marketing.
El marketing de contenido no es algo nuevo, desde el siglo XIX la firma estadounidense de implementos agrícolas, John Deer, creo una revista que se convirtió en una fuente de consulta obligada: The Furrow. Dicha publicación aún se publica en más de 40 países y 12 idiomas.
La clave de su éxito radicó en su filosofía de dar información, útil y relevante. Según Tom Sizemore, uno de sus editores por más de 30 años, lo que buscaban era el lado humano de las historias y no hablar de los productos de John Deer.
En 1900 Michelin, el fabricante de neumáticos creo un magazín de circulación gratuita que se convirtió en otro punto de referencia y no solo para la industria automovilística.
La guía Michelin actualmente es un objeto idolatrado en el mundo gastronómico. Lo curioso es que cuando se publicó existían menos de 50 mil autos en toda Francia.
Estas dos revistas, entre otras, fueron los precursores del marketing de contenido, una tendencia que fue creciendo con los años y que moverá, en 2021, más de 412 mil millones de dólares.
Beneficios y la integración con la tecnología
El porqué del crecimiento radica en sus grandes beneficios: genera credibilidad y posiciona a las empresas como expertos en su campo. No buscan vender, las ventas les corresponden a otros departamentos, busca generar confianza.
El content marketing ha evolucionado además con el tiempo integrando nuevas tecnologías como es el caso de los datos patrocinados.
Laura Alejandra Pérez, Profesional Soluciones Advertising, de Movistar Empresas nos recuerda que “los Datos Patrocinados ofrecen la posibilidad, a las marcas, de regalar la conectividad a sus clientes, mejorando así la relación cliente-marca y fomentando la cercanía entre ellos”.
De esta forma, la evolución del marketing de contenido busca no solo brindar información si no también los medios de llegar a ella. “Estas soluciones van dirigidas a todos los clientes B2B que quieran posicionar sus canales digitales e incentivar el uso de sus aplicaciones móviles o páginas web de todos los sectores de la economía”, agrega Pérez.
Además, el marketing de contenido también ha evolucionado sus formatos, del impreso tradicional a nuevos productos: podcasts, videos, textos enriquecidos, realidad virtual, etc. Pero siempre con una sola meta en común: entregar información útil que facilite el trabajo de sus consumidores.