«Solo tienes una oportunidad para causar una buena primera impresión». Esta frase, tantas veces escuchada, va de la mano de esta otra: “La primera impresión es la que cuenta”. Mientras la primera es totalmente cierta, la segunda muchas veces acaba siendo falsa. Pero en el tema que nos ocupa no suele haber una segunda oportunidad, por lo que hay que utilizar todas las armas a nuestro alcance para cautivar al inversor y conseguir la financiación que necesita nuestro proyecto.
¿Cómo lograrlo? ¿Qué esperan escuchar los inversores?
En primer lugar, debemos tener preparado nuestro discurso por si los hados nos son propicios y conseguimos cruzarnos con un posible inversor. Es el famoso elevator pitch, un breve mensaje de unos dos minutos (el tiempo que dura un trayecto en ascensor, de ahí su nombre) en el que debemos condensar lo más interesante para captar su atención.
Una vez que hemos conseguido una cita para reunirnos con el inversor y explicarle en profundidad nuestro proyecto, es cuando debemos seguir las pautas de la siguiente infografía:
