Muchas veces damos vueltas a las cosas y tenemos interminables reuniones de análisis y brainstorming, y en realidad todo se vuelve mucho más sencillo si preguntamos directamente a la gente que queremos convertir en clientes nuestros.
Eso sí, hay que saber preguntar, y después hay que saber dar un valor y consideración a las respuestas con sentido común y el filtro adecuado.
Desde encuestas sencillas a herramientas bien chulas
Está claro. Primero tienes que elegir la herramienta. En el medio online tienes plataformas sencillas y gratuitas para hacer encuestas sencillas como EncuestaFacil, que tiene una versión gratuita y otra de pago, y que permite configurar las preguntas, enviar o compartir la encuesta mediante un enlace y después exportar las respuestas y analizarlas a través de los gráficos que se generan.
Una solución muy sencilla y atractiva para encuestar a los clientes a posteriori, después de haber adquirido nuestro producto o de haber recibido el servicio, es la proporcionada por Emtrics. Sirve tanto para el canal offline como el online y se basa en el escaneo de un código QR con el móvil, para después responder a tan solo cinco preguntas seleccionando entre tres botones del tipo smiley. El panel de administración para gestionar las encuestas y los códigos es muy claro y completo.
Una aplicación muy completa y eficiente es Feebbo, sobre todo a la hora de decidir a quién se envían las encuestas, pues tiene su propia comunidad de usuarios, que son filtrados para lograr la máxima efectividad de la encuesta, según el nicho de tu negocio. Está a caballo entre una herramienta para sondeo de mercado y una herramienta de marketing, pues los usuarios son muy receptivos, ya que van a ser “recompensados” por rellenar la encuesta. De hecho, se paga por encuesta completada. Es una herramienta muy potente y bien planteada que cada vez cuenta con un mayor banco de opinión.
Recompensas e incentivos
Si de forma regular es una buena costumbre agradecer los comentarios o las valoraciones que usuarios y clientes nos hacen llegar sobre nuestro negocio, mucho más importante es ser cuidadosos y considerados con aquellos que se avienen a responder una encuesta.
Está claro que la forma de plantearla ha de estar totalmente enfocada al concepto de escucha del cliente y de la gran estima y valor que se le asigna a su opinión y observaciones, pero además hay que saber mostrar un agradecimiento en forma de incentivo o “recompensa”. Puede ser la participación en el sorteo de un premio, o un cupón de descuento, o la invitación a un evento especial que se organice desde la empresa para los clientes. Logramos así un doble objetivo: una encuesta completada con voluntad de ayudar y un cliente agradecido.
Marketing interactivo o pre-marketing
Ya hemos comentado antes que una encuesta bien orientada y presentada de forma atractiva puede convertirse en una interesante acción de marketing que, al involucrar la acción del usuario, multiplica su eficacia.
También es una vía para hacer una difusión previa al lanzamiento de un nuevo producto, de forma que el cliente se identifique con este de una forma más estrecha, al sentir que ha contribuido previamente al diseño o conformación del mismo con sus respuestas o la opinión que ha dado. En todo caso, puede ser una forma de hacer ruido en torno a un producto en una fase previa a su lanzamiento.
Aportar valor a la comunidad en general
Los resultados de una encuesta no solo benefician al que la ha emitido. Un buen análisis de los resultados así como una síntesis efectiva de las conclusiones, ocultando las que sean demasiado intrínsecas a tu negocio, puede ser presentada en forma de informe y publicada en el medio online para contribuir a dar una visión general sobre el sector o el tema general de la encuesta.
De esta forma, de nuevo, se logra atraer la atención hacia nuestra marca con el añadido de estar aportando valor a los usuarios que lean dicho informe.
Foto @mezone, distribuida con licencia Creative Commons BY-2.0