Es una pregunta que la gran mayoría se suele hacer a la hora de empezar con un blog: ¿Cada cuánto conviene que publique nuevos contenidos? ¿Cuál es la frecuencia más adecuada?
Siento decirte que, como en tantas otras cuestiones, aquí no hay verdades absolutas. En mi caso particular, publico a diario, los siete días de la semana. ¿Esto es mejor o peor?
Hay quien opina que publicar a diario puede ser (aparte de complicado para el propio bloguero, por el esfuerzo y dedicación que requiere) una frecuencia excesiva para los lectores y también he oído aquello de que puede afectar a la calidad de los contenidos.
A mí me va bien, pero mi blog ya tiene un recorrido y tengo muchos lectores fidelizados. No empecé escribiendo a diario, pero en los tres años que llevo haciéndolo y, pese a que el tráfico en sí mismo no es un factor que me obsesione personalmente, los resultados han sido muy satisfactorios, pasando de recibir 50 visitas diarias desde Google a 3000.
Pero, sobre todo, este hábito de publicar a diario me ha servido para tener el blogging tan interiorizado que forma parte de mi vida, de mi día a día, ni más ni menos. E igualmente todos mis lectores saben que cada día (concretamente a las 00:01 horas) van a encontrar un nuevo artículo en mi blog, que seguramente a veces les podrá interesar más y a veces menos.
Con esto no quiero decir que sea la mejor opción, es una más. En cualquier caso, la frecuencia ideal no es más que la adecuada para ti, para tu audiencia y para tus objetivos. Realmente, más allá de la frecuencia con la que decidas publicar, el verdadero quid de la cuestión está en ser regular. Éste suele ser uno de los principales errores a la hora de embarcarse en un blog, sobre todo si hablamos de blogs de empresa: la falta de regularidad.
Objetivo: situarse en el mapa
La frecuencia de publicación no es en sí misma un factor determinante del éxito de un blog. Sí lo son, entre otros, la constancia y la regularidad.
Pero, en todo caso, para coger el hábito, para situarte en el mapa para quienes quieres que sean tus lectores (y quizá mañana tus clientes), para conquistar también a los buscadores y para que realmente tu blog pueda ayudarte a conseguir tus objetivos (sean los que sean), sí deberías plantearte publicar en tu blog al menos un contenido nuevo a la semana.
A partir de ahí, tú decides. Pero, por favor, sé constante. De otro modo quizá tener un blog no sea la mejor opción ni para ti ni para tu negocio y puede convertirse en una pérdida de tiempo.
Foto: futureshape