Colocada ya en una posición privilegiada en el Hype Circle de Gartner y destacada por el World Economic Forum como una de las tecnologías emergentes, el blockchain se está convirtiendo en una de las apuestas más firmes en el ámbito empresarial actual.
Surgido como base tecnológica del bitcoin, el blockchain ha abierto un verdadero desafío en el backend de muchas empresas, teniendo a la industria financiera como principal adoptante.
Entidades como BBVA o Banco Santander poseen ya divisiones internas dedicadas a diseñar e implementar esta tecnología, e incluso empresas como IBM poseen una división de negocio específica dedicada a la aplicación de blockchain al Internet de las Cosas, entre otras actividades.
En qué consiste blockchain
La tecnología blockchain (o cadena de bloques, de su traducción del inglés) es un distribuidor descentralizado y público de operaciones (transacciones), no controlado por ninguna persona u organización y en el que cada usuario puede tener acceso a toda la tecnología.
De esta forma, cada operación es grabada de forma segura y es verificable al usar técnicas matemáticas provenientes de la criptografía. La información es agrupada en bloques como si fuera un libro de registro público y compartido).
Además, la transferencia de activos se realiza de forma transparente y sin posibilidad de manipulación, ya que la cadena de bloques permite verificar la fuente y el contenido en todo momento.
Implicaciones a medio plazo
Blockchain trata de desintermediar operaciones y agentes implicados. Este hecho podría afectar a muchas industrias de la economía, ya que agiliza sensiblemente sus procedimientos.
Aún queda por validar si esta tecnología tiene influencia en el ámbito comercial de las empresas, ya que parece estar destinado más a mejorar la eficiencia de sus operaciones y reducir de forma significativa sus costes.
Además de los dos puntos mencionados, esta tecnología pretende aumentar la seguridad en las transacciones y reducir el fraude derivado de las operaciones en la red y potenciar, por tanto, la confianza entre usuarios y organizaciones.
También permite realizar de forma rápida cualquier tipo de transacción, al eliminar intermediarios, reduciendo, como resultado, el tiempo necesario para realizar la operación.
Para ilustrar de forma aplicada cómo se está asimilando y gestionando el cambio, es necesario plantear algunos ejemplos de los sectores en los que esta tecnología comienza a ser una realidad:
- Nuevos actores de la industria financiera están testando la posibilidad de intercambiar dinero entre particulares sin necesidad de emplear la tradicional cuenta bancaria (algo parecido a lo que sucede con la compraventa de bitcoins). Los costes asociados para los usuarios son menores respecto a las comisiones que cobra la banca tradicional por este tipo de operaciones.
- Mercados como el inmobiliario en lo referente a la firma de documentos o el del ocio respecto a la compra de entradas están probando sus funcionalidades para incorporarla a su proceso operativo. En el primer caso, la gestión documental con abogados o notarios se convertirá en un punto clave.
- Empresas dedicadas a la gestión están trabajando en la presentación y validación de documentos contables de las empresas bajo esta tecnología.
- La gestión de la propiedad intelectual también puede verse afectada: Creative Commons Francia está desarrollando un sistema con el que autores y creadores puedan verificar que son los responsables de una obra y gestionar su utilización en el mercado.
- Países como Reino Unido o Canadá han lanzado recientemente proyectos que tratan de medir el impacto que esta tecnología puede tener para empresas, ciudadanos e incluso para la propia administración pública.
Obviamente, sectores como el retail, la comunicación o la industria legal se verán influidos muy pronto en sus procedimientos por el blockchain.
Hay que destacar que algunas startups españolas están compitiendo ya en este incipiente mercado, a nivel de consultoría, realizando proyectos para apoyar la transformación de grandes empresas multinacionales.
En definitiva, una tecnología que puede volver a revolucionar el panorama empresarial a nivel global, en el que la descentralización permite a más actores tener un papel protagonista y en el que la seguridad, la confianza y la rapidez serán sus atributos clave para tratar de ”cruzar el abismo” y convertirse en una tecnología masiva.
Foto: BTC Keychain