BidUpp es un proyecto pionero en Europa que ha reinventado la forma de pedir taxi. Se trata de una startup malagueña, acelerada dentro del programa Andalucía Open Future , que ha puesto en marcha una aplicación gratuita, desde la que cualquier usuario puede reservar un taxi y obtener la mejor tarifa posible para cada trayecto.
El cofundador de BidUpp, Alejandro Martín, taxista malagueño, decidió abandonar su trabajo, para modernizar este sector y responder con esta nueva plataforma a muchas de las necesidades que había observado durante más de una década en sus clientes.
En esta entrevista Alejandro nos cuenta en qué consiste esta innovadora plataforma gratuita.
P.- ¿En qué consiste la aplicación Bidupp?
BidUpp es una aplicación, además de una web, que permite a los conductores de taxis y minibús competir y pujar por los clientes o, lo que es lo mismo, al usuario subastar sus viajes para conseguir el mejor precio (siempre por debajo del precio oficial de mercado) en trayectos de medio o largo recorrido, por ejemplo, del centro al aeropuerto, el extrarradio de la ciudad o bien a otras localidades.
P.- ¿Y qué ventajas obtiene un usuario respecto a la forma tradicional de solicitar un taxi?
Imagina que necesitas un taxi y tienes la posibilidad, con tan sólo un clic de solicitar miles de presupuestos y conseguir el mejor precio para tu desplazamiento.
El propio sistema BidUpp demuestra que cuanto más distancia hay en el trayecto, mayor es el porcentaje de descuento que los taxistas están dispuesto a realizar, llegando a porcentajes de descuentos superiores al 40% sobre la tarifa oficial.
Pero conseguir los viajes más asequibles no es el único beneficio que obtienen los pasajeros: Obtener la factura al instante, conocer el importe exacto del trayecto antes de montarse en el taxi o poder comunicarse directamente con el conductor mediante el sistema de chat de la propia app son características muy importantes que demandan los usuarios y que BidUpp las hace posible.
P.- ¿Cómo se te ocurrió esta idea?
Durante 12 años fui taxista en Málaga y llevo 9 años gestionando transfers en aeropuertos. Cuando se lleva media vida dedicándose a un oficio las ideas suelen llegar solas, sobre todo si estás atento a las preocupaciones que tienen los clientes.
En el año 2007 los clientes comenzaban a demandar cada vez más reservas de taxis por la web. Conforme pasaban los años e inmersos en plena crisis, estos mismos usuarios comenzaban a ser más exigentes con la calidad del servicio y sobre todo con los precios. El mismo cliente que unos años antes hacía la reserva sin preocuparse del precio, comenzaba a ser más exigente y comparar las tarifas en otras webs de taxis.
Para adaptarme al mercado y no perder esos clientes que buscaban una mejora económica, tenía que ponerme en contacto con los taxistas para conseguirle un presupuesto más ajustado y que no decidieran contratar a la competencia. Esta situación me hacía perder mucho tiempo. Este fue el origen de la idea, que los taxistas recibieran la reserva del cliente y que ellos mismos le ofrecieran el mejor precio posible.
P.- ¿Qué necesidades observabas en tus clientes?
Sobre todo una. Pongo un ejemplo que seguro que se entiende mejor, si gracias a la tecnología y a las nuevas modalidades de consumo se puede comprar un electrodoméstico, un billete de avión o reservar la habitación de un hotel comparando las mejores opciones y precios posibles, ¿por qué motivo no se iba a poder solicitar un taxi y obtener los mismos beneficios? BidUpp pretende que los usuarios de taxis se beneficien de la tecnología para obtener un precio más asequible en sus desplazamientos. El cliente lo lleva demandando desde hace mucho tiempo, ya es hora de dejar de hacer oídos sordos a sus necesidades.
P.- El sector del taxi es muy tradicional, ¿cómo ha acogido este proyecto?
Es verdad que es un sector tradicional pero los tiempos cambian. El modelo de consumo, la economía colaborativa y las nuevas tecnologías reacondicionan la mentalidad del cliente a la hora de comprar o contratar un servicio, y eso lo sabe el sector.
Los números hablan por sí solos, al día siguiente de lanzar BidUpp teníamos registrados más de 200 taxistas, incluso hay asociaciones que se han puesto en contacto con nosotros para felicitarnos y comentarnos que lo que necesita el sector es ser más competitivos económicamente respecto a otras alternativas de transporte. De hecho, la propia Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia emiten informes económicos sobre los límites cuantitativos y las restricciones a la competencia en las tarifas del taxi y el daño económico que causa al consumidor.
Los precios no lo ponemos nosotros, es el propio taxista quien dice por cuanto está dispuesto a llevarte.
P.- ¿Desde dónde se puede descargar la app?
Actualmente está disponible en Android pero se está desarrollado ya para IOS, está previsto que para el próximo mes esté disponible para los dispositivos de Apple. Aun así, cualquier usuario puede reservar un taxi desde la web.
Hablamos de una aplicación gratuita ¿qué ganáis vosotros con este proyecto?
BidUpp es totalmente gratuito, tanto para clientes como para taxistas. Los taxistas abonan un pequeño porcentaje por la gestión sólo cuando realizan un servicio, a diferencia de las emisoras tradicionales, no tienen que pagar cuotas mensuales.
P.- ¿Cómo ves el mundo del emprendimiento en España?, ¿cuáles son los principales miedos?
Es la segunda startup que lanzo en 4 años y creo que la palabra miedo no debería existir en el lenguaje del emprendedor, el miedo te paraliza y no te deja avanzar. Desde el día que decidí dejar el volante para emprender duermo peor, tengo más preocupaciones y he arriesgado todos mis ahorros pero el espíritu de supervivencia que, cada día, observo en mis compañeros y en mí mismo es una sensación tan gratificante que, sin lugar a dudas, merece mucho la pena.
No sé la facilidad y ayuda que recibe una empresa en otros países, según dicen, iniciar un proyecto empresarial en España es mucho más complicado que en el resto de Europa, supongo que será una estrategia política para convertirnos en empresarios fuertes y acostumbrados a las dificultades, como si de auténticos Espartanos estuviéramos hablando (risas).
Lo que sí he aprendido es que un emprendedor tiene que concienciarse de que va a estar, como mínimo dos años, invirtiendo mucho tiempo y dinero en su proyecto para que salga adelante. Si este concepto lo tienes claro, tienes mucho ganado.
Foto: Equipo BidUpp