Estamos convencidos del valor de los blogs para las pymes, pero a menudo sucede que no se obtienen los resultados de audiencia esperados. En primer lugar, tenemos que saber que un blog no suele alcanzar los índices de audiencia de un medio de comunicación convencional o una revista especializada. Tenemos que buscar los indicadores que nos interesen y no medir el impacto sólo por el número de páginas vistas.
La primera recomendación es apostar por contenidos diferentes. Analiza los blogs que más te gustan y piensa qué valor aportan; así podrás saber qué esperan de un nuevo blog. Huye de los refritos y de las ideas ya vistas en otros blogs. Nadie se detiene a leer aquello que ya ha leído en otro sitio. Sé original y contribuye con posts específicos: tu experiencia utilizando una red social, tu crónica sobre un evento o feria comercial, tus consejos para captar clientes o tus lecturas recomendadas. Orienta tus contenidos hacia un público especializado, lo que te facilitará redactar posts cortos y directos.
En segundo lugar, escribir un blog es una técnica. Sugiero que practiques escribiendo a diario. Si no es posible, al menos una vez a la semana. Con la regularidad y el uso intensivo de las palabras clave de nuestra industria, ganamos peso en los buscadores relevantes. Recuerda que un post puede tener entre 300 y 600 palabras. Con eso basta para difundir una idea, porque puedes añadir enlaces, vídeos, presentaciones o comentarios. Asimismo, debes comprender los fundamentos del SEO de Google. En su propio blog te explican cómo funciona. Nadie te garantiza el primer puesto en las búsquedas, pero sí podemos alimentar una cadena de valor.
La tercera idea consiste en la difusión de los mensajes. Aquí es conveniente mezclar las estrategias en redes sociales con las actividades profesionales. Empieza por sindicar los contenidos y simplificar tu participación: conecta las redes principales (Tuenti, Facebook, si procede) con las profesionales (Linkedin), unifica tu identidad corporativa en Twitter y conecta con otras plataformas de la web social (Slideshare para repositorio de documentos o Bit.ly para acortar las URLs). Cuando tienes claro en qué redes te interesa participar y dónde está tu público lector, es más fácil establecer una estrategia. Te recomiendo que pruebes algún gestor o plataforma para mantener la conexión. IFTT.com es la novedad, pero también puedes recurrir a Seesmic, Hootsuite y otras herramientas parecidas.
Combina estas acciones con tu presencia real en foros y eventos profesionales. Es el momento de conocer gente (desvirtualizar, en la jerga 2.0) e intercambiar tarjetas de visita, invitaciones e ideas. Posteriormente, hay que actualizar la presencia en redes profesionales, invitar a los nuevos contactos a nuestras newsletters (¡ojo! no los incluyas sin preguntar). Aprovecha para ubicar en tu firma, tarjeta de visita y boiler plate la dirección de tu blog. Esto te compromete a mantenerte actualizado.
La cuarta dimensión es la dinámica de la conversación. No interesa mantener actualizado un blog sólo para nosotros mismos. Es un espacio abierto que sirve para dar y recibir feedback. Por eso, debemos incentivar la conversación comentando los posts de los blogs, respondiendo a las personas que nos preguntan, siguiendo la conversación en Twitter con un hashtag concreto o abriendo foros especializados en redes verticales. Piensa en los grupos de Linkedin como un espacio para mostrar tus actualizaciones y encontrar personas con tus mismos intereses. Asimismo, piensa que la conversación puede (y debe) incluir un sitio para los competidores. Hace unos meses, Olivia Walsh nos explicaba las ventajas de competir inter pares. Su argumento es bien sencillo: «Cuando sigo y converso con mis competidores, pongo de manifiesto los intereses comunes y el análisis del mercado». Nadie puede ocultar hoy día una situación de crecimiento, estancamiento o nuevas tendencias. Es mejor comentarlo con quienes están interesados. Además, el público objetivo al que se dirigen nuestros mensajes es parecido. Conversar (RT, blogs o redes verticales) en un espacio común enriquece. Por ejemplo, el grupo Tendencias en comunicación que administra @nuriavilanova en Linkedin cuenta con casi 2.000 profesionales del sector. Es un sitio favorable para hablar de lo que sucede en el entorno profesional.
En síntesis, no existe una receta mágica, pero sí podemos crear una estrategia online que alinee nuestros pasos en la red. No será fácil, pero ¡hay que intentarlo!
Foto @BrightonPiers, distribuida con licencia Creative Commons BY-2.0