¿Sabías que para alargar la vida útil de la batería de tu móvil conviene no dejar que baje del 15% de carga? O que es recomendable retirar determinadas fundas durante la carga y, muy importante, que si mantienes la carga constante entre el 20% y el 80% te durará más tiempo. Y estos no son los únicos consejos para alargar la vida de la batería del móvil.
Pasamos una media de 3,40 horas diarias ensimismados con la pantalla de nuestro smartphone. Según el estudio Digital Consumer by Generation de Smartme Analytics, nuestra atención se dirige principalmente a redes sociales y aplicaciones de mensajería, en una conexión con el mundo que entra en pánico cada vez que vemos que la batería está a punto de agotarse.
Esta Navidad, el teléfono móvil volverá a ser uno de los regalos estrella, y la cámara y el tamaño de pantalla no son los únicos factores a los que prestar atención. La batería es uno de los componentes que ofrecen una mejor experiencia, al alargar la autonomía de uso. Si además la cuidas, mejorarás su vida útil.
Cómo funciona la batería
Los fabricantes ofrecen información sobre la capacidad de la batería en miliamperios por hora (mAh) y en horas de duración sobre un uso medio estimado. Son habituales las de 3.500 y 4.000 mAh, si bien las de 4.500 y 5.000 mAh, más comunes hoy, son las recomendables.
Esta capacidad de dosificación de energía por hora, que se libera según la demanda de uso, se deriva en buena parte a la pantalla. En consecuencia, a mayor tamaño y resolución, más píxeles y más consumo, de ahí que una pantalla HD consuma menos que una FullHD, de mayor definición. Si no eres un obseso de la definición, es una cuestión que debes valorar.
Los otros factores que demandan más energía son la frecuencia de refresco de pantalla, punto en el que los juegos son muy exigentes. Aquí la unidad de medición es el hercio, de modo que una pantalla de 90 Hz refrescará 90 veces por segundo, una de 120 Hz, 120 veces…
El procesador es también una pieza importante. A mejor optimización, menor demanda de energía para una misma función. Lo mismo ocurre con los sensores de la cámara o las memorias RAM.
Por último, la demanda de energía también depende del uso que estemos haciendo del móvil. No es lo mismo navegar por Internet que ver vídeos o jugar, y la propia cobertura de red. Cuando nos conectamos en una zona de menor cobertura, se consume mayor cantidad de miliamperios.
Infórmate de qué batería tiene tu teléfono
Las baterías más habituales y recomendables en los modernos smartphones son de polímeros de litio, llamadas Li-Po. A la espera de que otras tecnologías fragüen, como las baterías en estado sólido, de polímero de grafeno o baterías de líquido iónico, son las que ofrecen mejores prestaciones, por encima de las de ión-litio (Li-ion).
Las baterías de LiPo son más pequeñas, pesan menos y alargan el ciclo de vida del dispositivo. Sin embargo, siguen perdiendo capacidad a medida que las cargamos, de ahí la importancia de hacer un buen uso.
Consejos para alargar la vida de la batería
Lamentamos decirte que no hay ninguna fórmula milagrosa. Con el uso, tu batería va a menos. Según Battery University, permiten entre 300 y 500 ciclos de carga en el caso de las Li-on.
Sin embargo, un buen uso puede servir para que dure más años y, sobre todo, para que mantengas lo más alto posible su capacidad de carga.
La primera carga
Las baterías de litio salen de fábrica con una pequeña carga. Por ello, antes de ser consumida, conviene recargarlas. Realizados los cinco primeros ciclos, alcanzará su máxima prestación.
Un buen cargador
Es suficiente con el que viene en el teléfono, pero si se rompe o extravía, no seas tacaño: compra uno de buena calidad. Siempre de 220 voltios y para baterías de litio.
Nunca por debajo del 15%
Es una de las recomendaciones más importantes, algunos expertos cifran el límite en el 20%. Recuerda que el efecto memoria (que limitaba la capacidad de carga de la batería si no se descargaba completamente) ha pasado a ser una leyenda urbana.
Mantén la batería entre el 20% y el 80%
Al reducir su estrés de uso, es la última tendencia para prolongar la vida útil de la batería. Así parecen indicarlo diferentes estudios en que se cita a fabricantes como Apple. Y no solo para móviles, también para la batería de portátiles e incluso vehículos, en este caso leo que la recomendación es de Tesla.
Si te parece complicado estar pendiente para que no baje del 15%, puede que con esta recomendación, ya te estés llevando las manos a la cabeza: tranquilo. En el caso de Apple, se puede activar el modo de bajo consumo, que avisa cuando está a menos del 20%. Si usas Android, puedes instalar sistemas como Battery Charged Limit, que permite establecer mínimos y máximos de carga.
Ojo con la temperatura y algunas fundas
Tanto las temperaturas muy altas como muy bajas afectan a las baterías. El rango recomendable es de 16º a 22º, por debajo de 0º o por encima de 35º grados pueden sufrir.
Como habrás observado, durante el tiempo de carga tienden a calentarse, por eso no conviene tenerlos más tiempo del necesario cargándose. Si observas que la funda de tu móvil aumenta la temperatura durante la carga, deberías retirarla cuando lo enchufas.
Si no lo usas
En caso de que el teléfono vaya estar inactivo durante bastante tiempo (tres meses o más), se debe guardar con media carga. Además de revisarlo cada cierto tiempo (para recargarlo y mantenerlo a ese nivel), debe estar en un lugar seco y lejos de una fuente de calor.
Cargar en un puerto USB
Es una opción recurrente cuando estamos trabajando, sin embargo, según Battery University, en muchos casos (en función de diferentes variables técnicas como la caída de tensión en el cable y conectores), “la batería solo se cargará hasta aproximadamente el 70% y ofrecerá un tiempo de funcionamiento ligeramente menor”.
Otras medidas para alargar la batería
Hay otras buenas prácticas más conocidas, como reducir el brillo de pantalla, cerrar las aplicaciones que no se usen o limitar las notificaciones, que también sirven para alargar el ciclo de vida de tu teléfono.
Nunca dejes el dispositivo cargando toda la noche (recuerda que es mejor no cargarlo al cien por cien de su capacidad), no abuses de la carga inalámbrica ni de la carga rápida, es más recomendable utilizar un cargador de más baja potencia cuando no hay prisas, como en casa o en el trabajo.
Por último, recuerda que las baterías son un residuo muy contaminante. Si la repones o cambias de modelo de móvil, encárgate de entregarla en el lugar adecuado, o simplemente utiliza los contenedores especiales de baterías.
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