Cada vez tenemos más acceso a teorías sobre cómo gestionar las empresas, pero a veces se nos olvida cómo gestionarnos a nosotros mismos. Por más que queramos, el cuerpo es el vehículo de la mente y el espíritu, por lo cual si no lo cuidamos, muy lejos no llegaremos. Es cierto que la mayoría conocemos las recetas de cómo tener una buena salud, nutrición y demás, pero pocos las aplicamos en especial con el ritmo de vida empresarial. Me encanta la gente que es capaz de sacar una hora todos los días para hacer deporte, pero yo no lo consigo. Por eso hoy quería compartir recetas sencillas, desde mi experiencia de emprendedor y que espero que tú también puedas aplicar o te sirvan de inspiración para elegir las tuyas propias:
- Observa tu cuerpo nada más levantarte; las sensaciones que tienes, incluso puedes tomarte las pulsaciones. Te ayudará a ver si has dormido bien o no. Esa consciencia te hará saber cómo plantear el día, verás que hace que cambien las cosas. Por ejemplo, para mí dormir es especialmente importante para mi estado de humor, así que si veo que no he dormido bien, prefiero no hacer llamadas por la mañana.
- Empezar por la mañana bebiendo agua. Aunque recomiendan un par de vasos de agua, yo suelo beber uno y algunos días medio. He comprobado que si lo primero que entra en el estómago es agua en lugar de café o bollos, ayuda a limpiarte y tener mejor el cuerpo el resto del día.
- Ten rutinas diarias. Los empresarios tenemos poco tiempo, por eso no pierdas mucho en pensar algunas cosas, créate unos hábitos y te liberarás de mucha carga mental. Como todo al principio puede costar un poco, pero luego te aporta muchos beneficios.
- Respirar 10 segundos antes de entrar en una reunión. Habitualmente vamos tan acelerados de un lugar a otro, empalmando reuniones a lo largo del día que nos estamos perdiendo cosas. Por eso es bueno que pares y respires 10 segundos antes de entrar en cada nueva reunión, incluso aunque llegues tarde, es mejor tranqulizarse y llegar 10 segundos más tarde que entrar acelerado y transmitirlo al resto.
- «Bebe tu comida y mastica tus bebidas». Este dicho taoista es realmente sabio, tómate tu tiempo para comer y ser consciente. Muchas veces comemos de cualquier manera, por las prisas, y no vemos que ello provoca que luego tengamos poca energía, sueño o irritabilidad…
- Haz algo de deporte a la semana, lo que puedas. Yo intento hacerlo al menos 3 días a la semana, pero no siempre lo consigo. El que más te guste a ti o te resulte cómodo practicar por horarios, cercanía, amigos que lo practiquen… Procura que el deporte lo puedas integrar en tu vida sin que sea un agobio o carga.
- Lo que sí llevo un tiempo practicando es yoga, al menos un día por semana. Es algo que recomiendo especialmente a los empresarios. Hay muchos tipos de yoga y elegir el más adecuado para ti y sobre todo un buen profesor es fundamental. Ojo, el yoga no es un deporte, por eso lo pongo en un punto independiente.
- Sonríe a la gente. A todos nos gusta que nos sonrían y he descubierto que la mejor forma de que la gente te sonría es sonriendo tú primero, no cuesta mucho y es gratificante.
- Acaba el día revisando lo que has hecho y aprendido, cosas que debes mejorar, temas pendientes, lecciones… Incluso puedes tener un cuaderno donde alguna vez anotes alguna frase o vivencia valiosa de ese día. Yo tengo uno donde escribo 2 o 3 veces al mes, pero son cosas de gran valor para mí.
- Da gracias por lo que tienes, cuanto pagues o cobres algo. Sé generoso y agradecido, es la mejor forma de atraer riqueza, que al fin y al cabo es para lo que creamos las empresas.
Espero que os sean útiles y os animéis a compartir vuestros consejos en los comentarios.
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